Los estudiantes bolivarianos de la Universidad Central de Venezuela exigieron a las autoridades de esta casa de estudio la realización de un referéndum en todo el Distrito Capital para definir si va o no la colocación de portones en los accesos de la ciudad universitaria de Caracas.
Esta información fue ratificada por Douglas Altuve, presidente del Centro de Estudiantes de la Escuela de Historia de la UCV, quien junto a un grupo de miembros del sector estudiantil y de la comunidad de la parroquia San Pedro impidieron la colocación del portón en la conocida y transitada entrada de Tamanaco (Plaza Venezuela), la cual estaba programada para este lunes 8 de febrero.
“Estamos debatiendo que no se cierren los espacios de la Universidad Central de Venezuela al pueblo y proponiendo que se haga una consulta a toda la ciudad de Caracas para constatar si están de acuerdo o no con las puertas que se les quiere imponer a la UCV. No se puede cerrar la posibilidad al pueblo de que entre a la universidad. La UCV no es de un solo grupo es de todo el mundo y por eso deben consultar a todas y todos”, indicó.
Aproximadamente a las 9:00 de la mañana, estudiantes bolivarianos de distintas escuelas de la UCV se concentraron en la entrada Tamanaco, donde ya se colocaban las bases para las puertas de este acceso. Ante esta situación un grupo de profesores y estudiantes del FCU, quienes se encuentran a favor de la medida, sostuvieron un intercambio de palabras con los bolivarianos para defender lo que a su parecer contribuirá con la seguridad interna de la UCV.
Altuve denunció que fueron agredidos por los profesores cuando protestaban por la instalación de los portones, lo cual consideran es un provocación de la rectora Cecilia Arocha para que algún estudiante agreda a un docente y se tenga una excusa para expulsarlo. Agregó que esta acción corresponde con la asumida en noviembre cuando se le abrió expediente a seis estudiantes por haber impedido la colocación de puertas en el acceso de Las Tres Gracias.
Kevin Ávila, presidente del Centro de Estudiantes de Trabajo Social, indicó que las autoridades presentan contradicciones en su mismo discurso, pues alegan que los portones estarán abiertos durante todo el día, justo cuando ocurren la mayor cantidad hechos delictivos dentro de la universidad.
“No basta con los filtros que le ponen a los ciudadanos con las pruebas internas de admisión con las que impiden que los estudiantes de liceos públicos ingresen a la universidad, sino que además quieren imponer portones negándole el acceso a todas las personas que quieran disfrutar de los jardines de la UCV, de la biblioteca central, hacer uso del hospital Clínico o de la línea de camionetas o de taxi que funciona dentro”, subrayó.
UNIVERSIDAD PERTENECE A LA COMUNIDAD
“La universidad tiene que ponerse de frente a la comunidad, es un espacio público, no es ningún gueto”. Así lo expresó Encarnación Del Blanco, vecina de la comunidad de San Pedro, parroquia a la cual pertenece la Ciudad Universitaria.
Del Blanco indicó que los vecinos nunca han recibido una convocatoria por parte de las autoridades de la UCV, para reunirse a hablar sobre aspectos importantes de la zona.
“La comunidad está sumamente molesta con la UCV porque está completamente a espaldas de los problemas del entorno. Cuando vienen los juegos, por los que perciben dinero, como dicen los estudiantes, no dan explicaciones sobre lo que reciben, (los juegos) ocasionan embotellamientos y no podemos llegar a donde queremos por las colas gigantescas que se producen”.
AUTORIDADES NO CEDERÁN
Pese a las protestas de sectores estudiantiles por la instalación de las puertas en los accesos de la UCV, esta medida seguirá realizándose. Así lo informó Bernardo Méndez, vicerrector académico, quien calificó de extralimitadas las pretensiones de algunos estudiantes de convocar a una consulta que incluya a los sectores fuera de la ciudad universitaria.
Méndez aclaró que desde el rectorado no están negados a la consulta, pero destacó que sólo la comunidad universitaria son quienes deben decidir lo que debe hacerse o no con la instalación de estas puertas.
RODERICK NAVARRO, PRESIDENTE DEL FCU-UCV «ESTAMOS DE ACUERDO CON EL REFERÉNDUM»
Bajo el pretexto de que forma parte de un plan integral de seguridad, el presidente de la Federación de Centros Universitarios de la UCV, Roderick Navarro, mostró su apoyo a la colocación de puertas en los accesos de la referida casa de estudios. No obstante, se mostró de acuerdo en convocar un referéndum aprobatorio donde sólo sea la comunidad ucevista la que decida la utilidad de las puertas.
“Esto es un plan de seguridad, el objetivo no son las puertas sino disminuir la inseguridad dentro de la universidad”, afirmó Navarro, quien aseguró que no quiere caer en el terreno de la confrontación con los ucevistas que se oponen a la medida sino buscar soluciones a la inseguridad interna.
De acuerdo a los publicado por el Rectorado de la UCV el “Sistema de Control de Acceso”, es decir, la colocación de la puertas -en las entradas Tres Gracias, Minerva, Técnica y Tamanaco- es para “reducir el riesgo y la vulnerabilidad del campus, así como controlar el acceso en la horas nocturnas y días feriados, salvo la puerta Técnica (entrada hacia el Hospital Clínico), la cual permanecería abierta las 24 horas.
“De esta forma si hay un robo de un carro dentro de la universidad se cierran los accesos y los cuerpos de seguridad pueden actuar para aprender al malhechor”, dijo Navarro.
No obstante, el dirigente estudiantil reconoce que la colocación de las puertas no es la solución al problema de la inseguridad. “Nosotros creemos que las puertas contribuirán a disminuir los niveles de inseguridad, pero no pueden verse como la solución, sino que forma parte de un plan de seguridad, en el que se tomará en cuenta el tema de la iluminación dentro del campus, así como reformar la dirección de seguridad, el cual debe ser integrado por personal capacitado para ejercer dicha función”, agregó.