Imagínese que en la mañana al salir al patio de su casa se consiga con siembras de lechugas de un verdor apetitoso y, más allá, con unos tomates rojizos que usted arrancará para utilizarlos en el desayuno. Parece un sueño, pero tener un cultivo urbano hoy en el país es más fácil de lo que se cree.
El coordinador de la Fundación Capacitación e Innovación para Apoyar la Revolución Agraria (Ciara) del estado Carabobo, Héctor Sánchez, informó que, por ejemplo, existen 2.944 unidades de producción agrícola en la región, entre las modalidades de urbana, institucionales, comunitarias, familiares y escolares.
En estas modalidades, sostuvo Sánchez, se incluyen los proyectos de Manos a la Siembra dirigido por el Ministerio del Poder Popular para la Educación. Las unidades en Carabobo produjeron el año pasado seis toneladas de rubros, pues se trata de áreas pequeñas. Una unidad puede comprender un metro cuadrado, explicó.
Una unidad familiar puede conformarse solo con una mesa organopónica, donde se produce más que todo pimentón, tomate o lechuga. El Ministerio de Agricultura y Tierras les otorga las semillas, las carretillas, las palas, los picos, en fin, lo que requieran, sostuvo.
A las personas se les capacita y se les apoya en el mantenimiento de las mesas organopónicas. Cuando las peticiones son mayores en una comunidad se hacen las evaluaciones pertinentes a fin de ayudarla, aseveró Sánchez.
Para este año ya se han cosechado en estos lugares nueve toneladas de diferentes alimentos. Se estima que culmine el año con 3500 unidades de producción agrícola en la región, la mayoría conformadas en los municipios Valencia, Los Guayos, Guacara, Libertador y Puerto Cabello.
“Casi la totalidad de esta producción va al autoconsumo. En el caso de las unidades familiares con mayor razón. Hay algunas familias que tienen 10 canteros organopónicos; entonces, lo que sobra de la cosecha se vende a las mismas comunidades”, expuso.
Sánchez apuntó que se asegura la materia orgánica de esos espacios mediante el centro Rafael Urdaneta: “En el municipio Libertador, además, estamos acomodando los terrenos para instalar cuatro casas de cultivo que darán varias toneladas (materia orgánica) cada tres meses”.
BASE AGRÍCOLA EN GUACARA
“Tenemos un proyecto de agricultura urbana y periurbana en el municipio Guacara, en la comunidad Los Naranjos. Se trata de una base productiva que posee 30 canteros organopónicos y tres casas de cultivo, una de ellas de hortalizas”, pormenorizó
Además, se crían de cachamas, lombrices y aves de corral. Se cuenta con un vivero de plantas ornamentales y canteros organopónicos de plantas medicinales. Un centro de formación y capacitación de los productores.
“Cada tres meses se producen dos toneladas de hortalizas y otros rubros en estos espacios de la base. Se cosechan lechugas, tomates, rábanos, zanahorias, pimentones, remolachas, berenjenas, entre otros”, especificó.
Sánchez consideró que se siembran los productos de mayor consumo de los venezolanos. “La base tiene un año, claro, en proceso de construcción permanente. Aún están por construirse otros espacios a fin de ampliar la variedad”.
“Contamos con 25 personas trabajando aquí. Unas 20 pertenecen a la Misión Sucre. Cinco personas son miembros de la comunidad que trabajan allí y que son los impulsores del proyecto en marcha”, subrayó.
Ahora, indicó Sánchez, se planifica la distribución de los alimentos. “Hasta este momento se ha distribuido a la misma comunidad. Porque no han registrado tantos excedentes, pues tenemos poco tiempo y no se han ocupado todos los espacios. Sin embargo, dentro de unos meses empezaremos a distribuir a las redes internas, por ejemplo, a Mercal”.
El proyecto de agricultura urbana también se desarrolla en la aldea universitaria Héroes de Canaima (Naguanagua). “Estamos articulando todos los proyectos de agricultura urbana, Fondo Zamorano tanto allí como en otros lugares”.
“De la base de Guacara se han desarrollado por ejemplo los 44 canteros organopónicos ubicados en la base naval de Puerto Cabello. Ese centro es de hortalizas que benefician a los trabajadores que les hacen mantenimiento a los barcos. El comedor también se abastece de esas hortalizas”.