Por Fernando Bossi|Los recursos naturales (Opinión)

Hay quienes dividen actualmente al mundo en cuatro bloques: 1. Países imperialistas con importantes recursos naturales, Estados Unidos por ejemplo; 2. Países imperialistas con escasos recursos naturales, caso Inglaterra, Holanda, Japón; 3. Países no imperialistas (al menos por ahora) con altos recursos naturales, los Brics por ejemplo, pero también Venezuela, México, Argentina y, 4. Países no imperialistas con pocos recursos naturales, casos como Haití, Somalia, Chad, Eritrea, las islas del Caribe.

Esta es una suerte de división del planeta de manera geopolítica, con base en los recursos naturales, pero que encierra a su vez ciertas claves para entender el desarrollo de la lucha por la hegemonía mundial.

Claro que en la necesidad de los países imperialista de adueñarse de los centros principales de recursos naturales (y los energéticos tienen prominencia) aparecen ciertos países o regiones que meramente, por su ubicación geográfica, pasan a ocupar posición estratégica.

Nos referimos a aquellos que podríamos considerarlos como países de “tránsito”. Un ejemplo de esto es Panamá (Canal Interoceánico), otro la región del Mar Negro y el Mar Caspio (paso de los principales gasoductos y oleoductos).

El Imperio Inglés, en su época, combinó cuatro elementos fundamentales para adueñarse de los recursos naturales de la periferia: 1) poseer la más importante flota mercante; 2) poseer la principal marina de guerra; 3) controlar los principales puertos y aduanas; y 4) manejar la banca. Claro que todo esto inyectando capitales, ya sea en infraestructura, préstamos leoninos o empresas agro-mineras.

Hoy, con los gasoductos y oleoductos, la cosa ha cambiado. No solo se requiere del control de las tradicionales vías comerciales, sino del total espacio continental de los países estratégicos, de aquellos que son dueños de los recursos, como de aquellos por donde esos recursos fluyen.

Si el imperialismo siempre fue guerrerista, agresivo y depredador, hoy lo es mucho más aún, hasta niveles realmente incalculables. Es por eso que la lucha por la soberanía y la paz tiene que ser, sí o sí, una lucha antiimperialista.

fernando.bossi.rojas@gmail.com

estoy con la posicion al respecto del presidente RAFAEL CORREA,MIENTRAS LAS GRANDES POTENCIAS POR SUS AFANES DEPREDADORES DEL MEDIO HAMBIENTE, contaminan, destruyen arrazan con toda forma de vida animal y vegetal los paises que aun les quedan recursos nadan en la miseria, la insalud, el atrazo y la pobreza extrema, dice CORREA LA NATURALEZ Y EL MEDIO HAMBIENTE DEBEN ESTAR AL SERVICIO DEL HOMBRE, NO EL HOMBRE AL SERVICIO DE ELLA, porque solo este es capas de preservarla, aumentarla y disfrutarla, lo que no de hacer ningun gobierno del mundo es poner sus recursos naturales al servicio de la voracidad del capital extranjero, porque en vez de permitir que saqueen los recursos no ahcemosa como en ecuador , bolivia, venezuela y otros, si no tenemos tecnologia o recursos para explotar nuestro patrimonio natural , paguemos tyecnologia, maquinarias, royalty ,join venture, en fin usted no puedes condenar un pueblo a vvir en la miseria por usted darsela de ser mas nacionalista, ecologistas