Una oleada de fuertes temporales provocó estragos en el central departamento colombiano de Risaralda, donde unas 500 familias resultaron afectadas hasta la fecha.
Según precisó el secretario de Infraestructura, Jesús Bermúdez, una de las zonas rurales con mayores daños registrados es Villa Claret, sujeta a posibles deslizamientos de tierra y desbordamientos de ríos, además de presentar un deterioro considerable de caminos, carreteras y puentes.
En estos momentos sus habitantes permanecen incomunicados, a lo cual se suma el desabastecimiento de alimentos y agua potable por los efectos de las lluvias en seis acueductos rurales.
Bermúdez precisó que la situación se agudiza ya que hasta el lunes venidero no llegará la maquinaria pesada que contribuirá a solucionar los problemas, pues la existente en Villa Claret no es la apropiada para paliar los estragos.