El presidente boliviano, Evo Morales, parte este sábado a las islas Fiyi (Oceanía) para participar en la Cumbre de los 77 (G-77) que congrega a 130 países y tiene como tema importante de la agenda la Cooperación Sur-Sur.
Morales es el único mandatario de América Latina invitado al encuentro por los programas y reformas que su Gobierno ha implementado para transformar la economía y reducir la pobreza extrema en el territorio boliviano.
En abril pasado el dignatario indicó que a Bolivia no la invitaban a ese tipo de encuentros y cuando lo hacían los gobernantes bolivianos sólo se adherían a las “palabras del representante de Estados Unidos”, situación que cambió porque “Bolivia ahora es un gran referente”.
La Cumbre del G-77 se extenderá del 7 al 9 de mayo, en un espacio que tienen los países en desarrollo para articular y promover sus intereses económicos colectivos y aumentar su capacidad de negociación conjunta dentro de las Naciones Unidas.
Actualmente, el encuentro busca articular el interés de los llamados países del sur, aumentar su influencia en foros multilaterales y promover la cooperación entre sus miembros.
El vicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera, también viajará este sábado y lo hará a Caracas (capital de Venezuela), para participar en la VIII Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de Petrocaribe.
La reunión tiene como tema central la profundización del convenio de Petrocaribe como legado integracionista del líder de la Revolución Bolivariana y comandante supremo, Hugo Chávez.
Ante la ausencia de Morales y García Linera fue designada como mandataria interina de Bolivia la presidenta de la Cámara de Senadores, Gabriela Montaño, según informó la ministra de Comunicación, Amanda Dávila.