El presidente Evo Morales reiteró este miércoles el objetivo de convertir a Bolivia en centro energético de Sudamérica, durante la inauguración de una Estación Satelital de Regasificación en el municipio de Uyuni, del departamento de Potosí.
La nueva estación beneficiará a miles de familias de esa localidad, puerta de ingreso del gran salar de Uyuni, el mayor y más alto desierto de sal del mundo.
Vamos cumpliendo nuestras tareas de llevar servicios básicos a la población, como agua potable, electricidad y gas, dijo Evo.
Recordó que antes había largas colas, especialmente en invierno, para comprar una garrafa y ahora eso terminó con el gas a domicilio.
Este tipo de obras son resultado de la lucha del pueblo para defender y nacionalizar sus recursos naturales, afirmó.
La instalación de la planta demandó una inversión de 39,2 millones de bolivianos (unos cinco millones de dólares) y, de acuerdo con el ministro de Hidrocarburos y Energía, Luis Alberto Sánchez, con ella se garantizará el abastecimiento de Gas Licuado de Petróleo (GLP) a la región.
Durante su discurso, el mandatario anunció diversos programas para el desarrollo de la energía geotérmica, hidroeléctrica y solar en el departamento de Potosí.
En el propio acto, fue suscrito un contrato para la construcción de la planta fotovoltaica Uyuni-Yunchará, que generará 60 megavatios para la región.
Nos hemos propuesto que Bolivia va a ser el centro energético de Sudamérica, lo cual significa que vamos a vender energía a Brasil, Argentina y otros países, declaró el mandatario.
Bolivia tiene prevista una inversión de 31 mil millones de dólares hasta 2025 en materia de hidrocarburos y energía.
El país andino amazónico avanza también en el cambio de la matriz hacia las fuentes renovables, hidráulicas o eólicas, con el objetivo de reducir a 20 por ciento la dependencia de la energía fósil.
Actualmente, el 75 por ciento de la generación la aportan las plantas termoeléctricas y el 25 las fuentes renovables.
El país andino amazónico tiene una posición geográfica privilegiada en el corazón de Sudamérica y ello le permite la exportación de energía a Brasil, Argentina, Perú y Paraguay.