El presidente Evo Morales viaja este martes hacia la sede de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en Nueva York, donde inaugurará el miércoles el Año Internacional de la Quinua.
Morales y la vicepresidenta del Perú, Marisol Espinoza, inaugurarán el Año Internacional de la Quinua, una actividad prevista, en principio, para octubre pasado y aplazada por el paso del huracán Sandy por la referida ciudad estadounidense.
Para Bolivia, la declaración de la ONU es una victoria importante en su afán de dar a conocer al mundo las bondades del llamado Grano de Oro de los Andes, considerado el más completo de todos los cereales.
El país plurinacional produce unas 48 mil toneladas de quinua al año, de las cuales exporta 36 mil, principalmente a Estados Unidos, su principal socio comercial para un producto que suele acompañar a los cosmonautas en su estancia en el espacio.
Las ventas de quinua le reportaron a Bolivia el año anterior unos 84 millones de dólares, según un informe del ministerio de Economía, que considera bajo el consumo en el país por lo elevado de sus precios.
Luego de la actividad del próximo miércoles, en la cual participará el secretario general del organismo internacional, Ban Ki-moon, Morales tomará rumbo a Malabo, Guinea Ecuatorial, para participar en una reunión entre jefes de Estado y de Gobierno de Africa y Suramérica.