En el aniversario 190 de la independencia de Honduras, el ex presidente y coordinador del Frente Amplio de Resistencia Popular (Farp), Manuel Zelaya, llamó a luchar por la verdadera emancipación del país centroamericano.
“No tenemos miedo y luchamos por la verdadera independencia de Honduras”, expresó el ex mandatario derrocado por un Golpe de Estado en junio de 2009.
La independencia hondureña fue recordada en dos actos, uno encabezado por el presidente Porfirio Lobo y otro en el que se congregaron los grupos que forman parte del Farp, organización nacida con el regreso de Zelaya del exilio.
El ex Jefe de Estado expresó que en la nación existen “grupos oligárquicos y sanguinarios que están gobernando más allá de las autoridades del Estado”, por lo cual están “descomponiendo la situación y atentando contra la estabilidad de Honduras”.
Zelaya manifestó que esos sectores quieren destruir a la resistencia surgida luego del golpe de Estado.
El dirigente apuntó que la oligarquía del país rechaza la democracia y busca más “persecución, violencia y desaparecidos como en la década de los 80”, cuando Honduras vivió un profundo conflicto interno.
Por esta razón, Zelaya llamó a “denunciar y combatirlos en cualquier campo en que nos toque porque estamos en riesgo todos”.
Desde el Farp se exigió el cese de los asesinatos de sus seguidores y que se aplique justicia con los autores de los crímenes, una Asamblea Nacional Constituyente, respeto a los derechos humanos y castigos a los autores materiales e intelectuales del golpe de Estado.
Desde que la dictadura cívico-militar, encabezada por el empresario Roberto Micheletti, tomó el poder en junio de 2009, la represión interna se recrudeció en Honduras.
Luego de las polémicas que llevaron a Lobo a la Presidencia en 2010, la situación no ha cambiado, y decenas de miembros del Farp y campesinos fueron asesinados, sin hasta ahora encontrar culpables.