El 40 por ciento del territorio colombiano muestra algún grado de erosión, terrenos dañados por la incidencia de fenómenos climáticos y donde proliferan procesos de desertificación, pérdida de cobertura vegetal y salinización, advirtieron hoy expertos.
Según recientes estudios existen cinco focos activos de deforestación en el país, situados en el noroccidente del departamento de Caquetá, en zonas de Putumayo, Guaviare, en la región del Pacífico y en Antioquia.
De acuerdo con especialistas, un centímetro de suelo necesita de 200 a 500 años para formarse, pero la caída de un aguacero durante media hora en un espacio recién arado podría ocasionar estragos en la tierra de manera inmediata.
Investigadores del Instituto de Hidrología y Meteorología con el auspicio del Ministerio para el Ambiente trabajan en la actualización de un sistema de alertas tempranas.
Tal iniciativa prevé la elaboración de partes o avisos para contrarrestar el impacto de la desertificación y otros flagelos que atentan contra la conservación y fertilidad de los terrenos, precisó la emisora de alcance nacional.
Esos boletines tienen como sustento valoraciones sobre el posible efecto de variables meteorológicas como las lluvias, las altas temperaturas o el viento.
Colombia clasifica entre los países de mayor biodiversidad, al abrigar a una de cada 10 especies de la flora y la fauna, ya sean terrestres o acuáticas. Actualmente posee más de medio centenar de parques naturales y cinco Reservas de la Biosfera.
Prácticas agrícolas nocivas para el medio ambiente y la ocurrencia de incendios forestales constituyen también causas de la deforestación y la erosión, adicionalmente ambos actúan como catalizadores de la desertificación, opinan conocedores.