Al menos cinco niños palestinos resultaron heridos este sábado, como consecuencia de la explosión de una antigua bomba, colocada en el este de la ciudad Deir al-Balah, situada en el centro de la Franja de Gaza, según informaron los testigos.
De acuerdo con las fuentes médicas, los niños heridos pertenecen a una misma familia y tienen entre 4 y 10 años. El estallido ocurrió cuando jugaban en el lugar, que está a 17 kilómetros del sur de la ciudad de Gaza.
Este fue el mismo lugar, que el pasado 17 de junio invadieron los tanques y buldóceres del régimen de Tel Aviv, dejando como saldo un palestino herido.El régimen israelí también destruyó terrenos agrícolas de la ciudad.
El régimen de Tel Aviv suele dirigir regularmente ataques aéreos y terrestres contra la Franja de Gaza. Durante un periodo de seis días, del 18 al 23 de junio, estos ataques israelíes dejaron en esta región al menos una docena de palestinos muertos, mientras que muchos más resultaron heridos.
Los ataques israelíes, tanto por aire como por tierra, no son lo peor que ha vivido la nación palestina, ya que ellos tienen prohibidos los derechos fundamentales de un ser humano como la libertad de movimiento, una vida digna, trabajo, salud y educación.
Estos actos inhumanos no solo no han sido rechazados por la Comunidad Internacional, sino que ésta con su silencio ofrece su apoyo a ese régimen, e incluso otorga la “Medalla de la Libertad” al presidente de Israel, Shimon Peres.
El 13 del pasado junio, el presidente estadounidense, Barack Obama, entregó a Shimon Peres durante una ceremonia celebrada en la Casa Blanca la Medalla Presidencial de la Libertad, el máximo galardón civil otorgado por el Gobierno de EE.UU.
El mandatario norteamericano le agradeció a Peres, de 88 años, su colaboración con todos los mandatarios estadounidenses, desde Jonh F. Kennedy en los años 60 hasta el actual presidente, e hizo hincapié en que las relaciones entre EE.UU. y el régimen israelí son “inquebrantables”.