Las FARC-EP calificaron este viernes de injustificada la polémica promovida por la derecha tras la presencia de delegados de ese movimiento insurgente en La Guajira y llamaron al Gobierno colombiano a superar de conjunto el reciente impasse.
El momento actual cuando la posibilidad de firmar un acuerdo pacifista definitivo se hace más cierta, exige de los principales protagonistas del proceso la firme decisión de sortear de manera concertada cualquier obstáculo en el camino de la solución política, afirmó el grupo rebelde.
Desde 2012 representantes gubernamentales y de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) conversan en Cuba con el objetivo de hallar una salida a la guerra interna por la vía del diálogo.
La víspera, el abogado Humberto de la Calle anunció que las visitas de delegados de las FARC-EP en tales reuniones a sus campamentos, para hacer pedagogía sobre los convenios suscritos en La Habana, quedan suspendidas por considerar que durante la más reciente ocurrida ayer violaron normas establecidas para su estancia aquí.
Un grupo encabezado por el comandante Iván Márquez, principal portavoz de esa organización guerrillera en la mesa de La Habana, estuvo en La Guajira con la finalidad de socializar los tratados conseguidos hasta el momento dentro de las gestiones pacifistas, iniciativa que suscitó airadas críticas de sectores como el partido de derecha Centro Democrático.
Tras el manido argumento del proselitismo armado, se pretende imponer el aislamiento de nuestra delegación y la prohibición de interactuar con los distintos sectores de la sociedad interesados en conocer los desarrollos del proceso, subrayó las FARC-EP en un comunicado publicado por su portal digital.
En opinión de ese movimiento no se pueden argumentar inexistentes compromisos en los protocolos acordados por las partes para el traslado hasta Colombia de los enviados de las FARC-EP a la mesa de conversaciones, en un intento por desconocer el derecho a la libre información que asiste a todos los ciudadanos.
Según De la Calle, jefe de los negociadores del Gobierno en dichas pláticas, el Ejecutivo es consciente de la necesidad de que los integrantes de esa agrupación conozcan los consensos logrados en la capital cubana y se comprometan con ellos, pero reprobó la presencia ayera de civiles junto a actores armados, la cual -aseguró- no está prevista dentro de las reglas establecidas.
Se indignan los pregoneros de la continuación de la guerra porque nuestros voceros llegan desde La Habana con un mensaje de paz y reconciliación a uno de los departamentos más castigados por el olvido y la corrupción de las élites gobernantes, enfatizó las FARC-EP.