El viceministro de Defensa Civil, Óscar Cabrera, informó que el fenómeno climático de El Niño dejó 23 personas muertas, quienes resultaron afectadas por el desborde de ríos, inundaciones y deslizamientos en el occidente y oriente de Bolivia.
“El fenómeno de El Niño, además de cobrarse la vida de estas 23 personas, causó desastres naturales que afectaron a poco más de 10 mil familias” en los últimos dos meses.
De acuerdo con el documento Evaluación de Daños (EDAN), a nivel nacional, se registraron más de 800 viviendas seriamente afectadas y en el área agrícola se perdieron 10 mil 657 hectáreas.
El fenómeno de El Niño afectó a ocho de nueve departamentos y de 58 de 339 municipios, según reseñó la Agencia Boliviana de Información (ABI).
“Estamos preparados y pendientes para atender las emergencias que se suscitan por efecto de las precipitaciones pluviales”, dijo.
El departamento subandino de Chuquisaca (sur) es el más afectado por los aguaceros caídos desde octubre.
Cabrera recomendó a las autoridades municipales y departamentales mantener las medidas preventivas necesarias ante el ascenso de los niveles de agua en los ríos.
Cerca de las 10 mil familias damnificadas, mas de siete mil han recibido ayuda humanitaria de Defensa Civil, pero en función al requerimiento que hace el municipio local, sostuvo.