La Canalla Mediática|Fernando Buen Abad: Evo Morales y la dictadura del espionaje (Opinión)

Ese secuestro al que fue sometido el presidente de Bolivia hunde sus raíces en la “Guerra de IV Generación” que también se expresa en los territorios del espionaje.

En ese secuestro hay un mensaje mafioso y hay muchos mensajes patentes y latentes.

Ese secuestro es una mueca histérica de la oligarquía yanqui que, desnudada por uno de los suyos, dejó expuesta ante el mundo una de sus más viejas perversiones, basada en espiar a todos a toda costa.

Evo Morales no es un “actor” casual en un “incidente” aéreo intrascendente.

Se trata de una operación que, bajo el pretexto paranoico de evitar la fuga de Edward Snowden supuestamente abordo del avión presidencial boliviano, manda una retahíla de comunicados antipáticos para que nos sometamos a los principios de autoritarismo colonial del imperio.

Al margen de los hechos ofensivos inherentes a semejante agresión al pueblo boliviano está el muy grotesco modo del servilismo encarnado en gobiernos que, también espiados, son víctimas de los tratos más indignantes y criminales por parte de la burguesía yanqui.

También en ese episodio grotesco brilla con fulgor propio la operación mediática que se esmera, a cada minuto, por diluir entre eufemismos y palabrería diplomática una de las afrentas más obscenas de la decadencia del capitalismo.

Esa operación mediática trata de lavar la arrogancia imperial y trata de convencernos de que su espionaje es cosa “natural”, que es “parte del paisaje” y que nos “acostumbremos” porque ellos tienen derecho a sospechar de todos a cualquier hora… porque todos somos sospechosos de “terrorismo”, y más, si hemos sido protagonistas de expresiones soberanas o de luchas por la liberta y la dignidad. Y encima quieren que se los agradezcamos.

T/ Fernando Buen Abad Domínguez
buenabad@gmail.com
México / DF.