Una amplia mayoría de franceses prefiere mantener el horario de verano por todo el año, cuando Europa se apresta a poner fin a los cambios de hora reglamentarios hasta ahora.
De acuerdo con la consulta no vinculante realizada por la Asamblea Nacional, el 59,17 por ciento de los ciudadanos desea que se mantenga el horario de verano, frente a un 36,97 por ciento favorable al de invierno.
En general, el 83,71 por ciento de los franceses apoya el fin de los cambios de hora, y solo un 16,29 por ciento desea su permanencia.
La Cámara Baja parlamentaria detalló que 2.103.000 personas participaron en la encuesta, un nivel de participación «excepcional» que muestra el interés de los franceses en las cuestiones europeas cuando estas atañen su vida cotidiana, resaltó la presidenta de la comisión de Asuntos Europeos, Sabine Thillaye.
El titular de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, presentó hace algunos meses la proposición de permanecer todo el año con un solo horario.
En este 2019, el cambio hacia la hora de verano previsto en marzo deberá ser el último obligatorio para todos los países que integran el grupo comunitario.
Asimismo, las diferentes naciones deberán decidir antes de abril con qué horario prefieren quedarse, si con el de verano o invierno.
En el caso de Francia, el ministro de Transición Ecológica, François de Rugy, se mostró favorable a reducir la brecha con la hora natural del Sol, lo que se consigue con la hora de invierno.
No obstante, ninguna decisión está tomada y «es necesario discutir el tema para ver los efectos concretos en la vida cotidiana y en el gasto de energía», declaró a la televisora France 2.