Al menos 454 personas sin hogar fallecieron el año pasado en Francia, entre ellas 15 niños, de acuerdo con un balance publicado este lunes por una asociación de asistencia social.
El colectivo denominado Los muertos de la calle se dedica a contabilizar anualmente los decesos ocurridos entre los sin techo, de acuerdo con las estadísticas ofrecidas por los servicios públicos, la policía, los bomberos, las alcaldías y organizaciones privadas.
De los infantes reportados, 10 pertenecían a la comunidad gitana y la mayoría de quienes perecieron fue debido a accidentes de diverso tipo, si bien se reportaron cuatro casos en los cuales la causa radicó en la falta de atención médica a la madre durante el embarazo. Conocidos aquí como Sin Domicilio Fijo (SDF), los carentes de hogar tienen una esperanza de vida mucho más reducida respecto al resto de la población francesa.
En la región del Ile-de-France, donde está comprendida esta capital y siete departamentos circundantes, un SDF alcanza como promedio 53,4 años y en el interior se reduce a 48,4, muy por debajo de la media de 77 a nivel nacional.
Aunque los datos son incompletos, en muchos de los casos registrados en 2013 la muerte sobrevino tras permanecer en las calles entre ocho y 12 años, precisó el informe.