Multitud|Fuerzas sociales emergentes (Opinión)

Con el inicio de la Revolución Bolivariana se frustraron las expectativas de aquellos que pretendían confiscar el país: la burguesía parasitaria en alianza con la clase política depredadora. A partir de ese momento, poco a poco, un nombre fue creando su propio régimen de visibilidad. De allí se sucedieron movimientos populares que no repiten la fisiología rastrera de las élites tradicionales latinoamericanas, ante el golpe cotidiano del autoritarismo imperial del Norte.

Por el contrario, lo que se levanta desde abajo es la relación abierta de nuevas composiciones sociales de los sectores y clases subalternas que conforman los distintos estratos de la multitud y sus realidades heterogéneas, que ahora contestan en voz alta ante el poder del capital. Al mismo tiempo que en su interior se entabla un diálogo y una refriega en torno al futuro del proceso en curso.

El nuevo tiempo histórico que se abre construye constelaciones de momentos estelares que, de no ser aprovechados por las fuerzas sociales emergentes, quedarán subsumidos a favor de las corrientes conservadoras visibles o subterráneas.

Las nuevas figuras políticas, léase por ejemplo las redes del Poder Popular revolucionario, o los diferentes grupos del Poder Popular en los territorios comunales, obligan a pensar los dinamismos de la política desde también nuevas configuraciones conceptuales.

La crisis económica mundial en marcha nos obliga, sin duda, a acelerar las alianzas y recomposiciones tanto a lo interno como hacia fuera, para fortalecer la nueva hegemonía aún en ciernes.

En este contexto, es importante señalar lo que dijera Deleuze: “El pensamiento solo ocurre entre una crisis y otra, en la rendija y de manera perturbadora e inesperada. Hay que tener en cuenta que los paisajes mentales no cambian sin son ni ton, son refractarios a lo nuevo, se resisten y reaccionan ante la presencia de las nuevas subjetividades”.

Por eso, se hace imprescindible que desde la voluntad política de los nuevos sujetos, es decir, desde el Poder Popular han de surgir propuestas y acciones afirmativas con carácter constituyente.

Texto/Juan Barreto (juanbarretoc@gmail.com)
Caracas