Un grupo de jugadores amenazó con irse a huelga|Continua la crisis en el fútbol español

Federación de fútbol y jugadores por un lado, la Liga y el gobierno por el otro: España vive una guerra de trincheras que amenaza con parar el fútbol nacional al final de la temporada, debido a desacuerdos en el nuevo reparto de los derechos de televisión.

Arropado por unos 50 jugadores entre los que figuraban los madridistas Iker Casillas y Sergio Ramos y los azulgranas Andrés Iniesta, Gerard Piqué y Xavi Hernández, el presidente de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), Luis Rubiales, compareció ante la prensa para anunciar que harán huelga a partir del 16 de mayo si no se modifica la nueva norma.

«Se nos ha llevado a un callejón sin salida, nosotros no queríamos llegar a este nivel», afirmó, lamentado que no se les consultara en la elaboración del texto pero a la vez declarando la disposición del sindicato a negociar.

El miércoles había sido la Real Federación de Fútbol Español (RFEF), de quien depende asignar a los árbitros, la que anunciaba la suspensión de todas las competencias a partir de esa fecha y disparando las alarmas, puesto que pone en peligro las dos últimas jornadas de Liga en que se decidiría el campeón.

También corre peligro la final de la Copa del Rey, prevista para el 30 de mayo en el Camp Nou entre Barcelona y Athletic Bilbao.

MEDIDAS

Como la RFEF, los jugadores no están de acuerdo, aunque por motivos diferentes, con un decreto ley aprobado el 30 de abril por el gobierno español para la venta centralizada de los derechos de televisión para el fútbol nacional.

Éste permite a la Liga de Fútbol Profesional (LFP) negociar en bloque con las operadoras televisivas para realizar después el reparto entre clubes, en lugar del modelo actual, por el que cada club negocia individualmente, que muchos pedían desde hace años se modificase.

Estos ingresos se distribuirán a 90% entre los clubs de primera división y 10% para los de segunda.

«Pedimos menos diferencias en el reparto entre primera y segunda como sucede en Europa», afirmó Rubiales, poniendo como ejemplo los casos de Alemania, donde el reparto es de 79%-21% y de Francia, donde es de 81%-19%.

También negó que su protesta estuviese relacionada con las nuevas imposiciones fiscales a los jugadores por sus ingresos derivados del derecho de imagen.

MÁS PROBLEMAS

«La convocatoria y los objetivos de la huelga son ilegales», fustigó la LFP, anunciando que hoy presentará una denuncia ante la justicia

También la decisión de la RFEF, que con la nueva norma perderá ingresos y poder, había sido duramente criticada por la LFP y el Consejo Superior de Deportes (CSD), organismo gubernamental, que la acusaron de actuar por interés propio.

«Sólo responde a un interés personal», dijo el presidente de la LFP, Javier Tebas, que calificó de «chantaje» la decisión de la Federación.

El muy poderoso Angel María Villar, presidente de la RFEF y vicepresidente de la FIFA, «cree que el gobierno de su país para hacer algo tiene que contar con su beneplácito, con su autorización», afirmó por su parte el presidente del CSD, Miguel Cardenal.

El nuevo encontronazo supone un paso más en la lista de desencuentros de la RFEF con el CSD y la Liga que se evidenció especialmente durante la negociación del nuevo decreto, aunque existen otros varios motivos de desencuentro.

Los presidentes y directivos de clubes «están contentos con este Real Decreto, que es un hito histórico, y un osado se lo pretende cargar. No lo vamos a consentir», afirmó Tebas.

En España se está a dos semanas del final de la temporada futbolística en España y también a dos semanas de unas elecciones regionales y municipales de gran importancia en el país por ser consideradas como un test para las legislativas de finales de año.

TyF/AFP