“La solución a los problemas no puede ser el enfrentamiento, la confrontación estéril, la violencia. Busquemos la paz por la vía política, por la vía electoral, por la vía del diálogo”
(Presidente Nicolás Maduro Moros)
Esta semana ha sido crucial para el pueblo y el Gobierno venezolano. El lunes 13 de noviembre, se inició con los acreedores y tenedores de bonos, el proceso de reestructuración de la deuda externa. Una iniciativa que pretendió ser obstaculizada con sanciones impuestas de manera unilateral y arbitraria por la Unión Europea (UE). Además, ese día se realizó una maniobra infructuosa auspiciada por la embajadora de Estados Unidos ante la Organización de Naciones Unidas (ONU), Nikki Haley, quien buscaba incluir en la agenda del Consejo de Seguridad, el tema Venezuela, por considerarlo la administración Trump, una “amenaza regional”. Pero el Ejecutivo salió airoso de los intentos orquestados por los centros de poder para llevar al impago al Estado venezolano.
Los Estados Unidos y sus gobiernos aliados, realizaron todo tipo de maniobras políticas, financieras y diplomáticas para intentar aislar y cercar a la Revolución Bolivariana, en vísperas del reinicio del proceso de diálogo de paz entre el Gobierno y la oposición anunciado para el miércoles 15 en la República Dominicana y posteriormente pospuesto para el jueves 16, ante una nueva negativa de la dirigencia opositora.
Pese a ello, la diplomacia de paz bolivariana obtuvo una victoria histórica con la jornada de trabajo que se realizó ayer, en la hermana nación caribeña donde se hicieron coordinaciones preparatorias entre representantes del Gobierno Bolivariano y de la oposición para el inicio formal del proceso de diálogo en los días 1 y 2 de diciembre, según anunció en un comunicado la Cancillería dominicana.
Como se recordará, el primer encuentro para el reinicio del proceso de diálogo fue realizado el pasado 13 de septiembre de este año, donde se abordó una agenda con puntos referentes a la soberanía del país, el repudio de acciones injerencistas e intervencionistas contra Venezuela, y la necesidad de preservar la paz.
Un nuevo encuentro fue pautado para el 27 de septiembre, junto a una comisión acompañante integrada por México, Chile, Bolivia y Nicaragua. La cita no pudo llevarse a cabo ante la negativa de la oposición venezolana de asistir a Santo Domingo en la fecha previamente acordada, alegando incumplimiento por parte del Gobierno de una serie de supuestos acuerdos que nunca fueron dados a conocer antes por sus dirigentes.
Desde esa fecha a la presente, la comunidad internacional ha manifestado su férreo apoyo a la iniciativa del diálogo propuesta por el presidente Nicolás Maduro Moros para buscar soluciones en conjunto para la problemática del país. En especial, para el área económica. El avance positivo del diálogo fortalecerá al Estado con la incorporación de todos los sectores al reimpulso productivo y generará mayor confianza para la inversión y la reestructuración de la deuda externa.
El ministro del Poder Popular para la Educación, Elías Jaua, dijo el lunes en su programa radial que el país requiere este proceso de diálogo para avanzar hacia la estabilidad política y económica.
Por su parte, el ministro de Información y Comunicación, Jorge Rodríguez, también integrante de la Comisión del Ejecutivo Nacional en la mesa de diálogo, indicó en la víspera que el Gobierno Bolivariano acudiría a este nuevo encuentro sin ningún tipo de condiciones y sin permitir la injerencia de gobiernos extranjeros.
Por la unidad popular
En su programa Con el Mazo Dando, el primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, se refirió al que sin duda ha sido el tema de la semana: El diálogo.
Al respecto, Cabello dijo que Venezuela requiere «una oposición de verdad, al menos nacionalista, que ame a este país que se respete entre ellos y que no este dando los espectáculos que están dando en la calle, que están dando afuera de Venezuela entregados y arrastrados al imperio».
En ese sentido, rechazó el doble discurso de los dirigentes de la derecha en torno por ejemplo a la participación en los recientes procesos electorales, para las regionales sí, pero al perder la mayoría de las gobernaciones, se niegan a hacerlo en las municipales, Lo mismo sucede con su “indecisión” frente al diálogo con el Gobierno Bolivariano.
Sin embargo, y pese a esas contradicciones internas de la oposición, Cabello recalcó que el Gobierno revolucionario insistirá en el diálogo y fortalecerá la unidad popular. «Así como el Comandante Hugo Chávez siempre llamó al diálogo, siempre llamó a la unidad, igual lo hace nuestro hermano Nicolás Maduro», destacó.
También la constituyente Tania Díaz, presidenta de la comisión de Comunicación e Información de la Asamblea Nacional Constituyente, manifestó ayer en un programa televisivo que esperaba que la oposición aceptara sentarse, una vez más, en la mesa de diálogo con representantes del Gobierno nacional.
«Rogamos que la oposición se siente en la mesa de diálogo. El presidente Nicolás Maduro ha hecho más de 300 llamados al diálogo y la oposición siempre se retira», resaltó Díaz.
Y claramente, la estrategia del Ejecutivo Nacional de reiterar la convocatoria al diálogo como herramienta para la paz está rindiendo sus frutos, como pudo observarse ayer en República Dominicana.
La convivencia es el deseo del pueblo venezolano
El presidente de la Comisión de Relaciones Internacionales de la Asamblea Nacional Constituyente, Adán Chávez, expresó en su columna Sentir Bolivariano, que pese a todas las amenazas y acciones injerencistas de las que ha sido objeto el país en los últimos días “como clara muestra del espíritu de paz y convivencia que anima a la inmensa mayoría de las y los venezolanos” se produciría esta semana una nueva reunión en República Dominicana para el reinicio del proceso de diálogo nacional “de la cual se esperan resultados satisfactorios que contribuyan a consolidar la paz conquistada por el pueblo el 30 de julio con la elección de la ANC”.
Y es que tras una ola de violencia desatada por la ultraderecha durante los meses de abril, mayo y junio del presente año, con un saldo fatídico de más de un centenar de víctimas mortales y millones de dólares en pérdidas para la propiedad pública y privada, el pueblo se manifestó en favor de la paz en la elección de una nueva Asamblea Nacional Constituyente, propuesta por el presidente Nicolás Maduro Moros. La instalación del poder originario, fue la primera gran derrota de los sectores que buscan llevar a la nación a la confrontación y la guerra civil.
Al elegir la ANC, más de 8 millones de venezolanos dieron también su respaldo a la opción del diálogo, porque tal y como decía el famoso estribillo de esa campaña “hablando se entiende la gente”. La convivencia pacífica, el respeto a la diferencia y a las minorías fue la opción que decidió el pueblo.
Y tras la instalación de la ANC, se produjeron las elecciones regionales, donde nuevamente se puso de relieve la vocación democrática de los venezolanos. Sin embargo, la actuación ambigua de la oposición, conduce nuevamente a la necesidad de fortalecer la iniciativa del diálogo como única vía para preservar la paz ganada en estos procesos de elección popular.
Otro circo mediático sin éxito
Mientras representantes del Gobierno Bolivariano y la oposición, celebraban las reuniones preparatorias para la concreción del proceso de diálogo en República Dominicana, la exfiscal de la República, hoy prófuga de la justicia venezolana, Luisa Ortega Díaz, montó un circo mediático en La Haya, sede de la Corte Penal Internacional (CPI) desde donde aseguró que consignó un documento denunciando a cino funcionarios venezolanos, entre ellos al jefe de Estado, Nicolás Maduro Moros, por crímenes de lesa humanidad.
Según la exfuncionaria, como no “existe justicia en Venezuela” acudió ante esa instancia para solicitar una orden de captura contra el presidente Nicolás Maduro, los ministros Vladimir Padrino López y Néstor Reverol; Gustavo González López, director del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), y Antonio Benavides Torres, jefe de gobierno del Distrito Capital.
Este nuevo episodio mediático de Ortega Díaz, fue duramente criticado por la misma oposición venezolana que le advirtió que el procedimiento viola toda la normativa internacional de cómo hacer una denuncia de ese tipo, y recuerda mucho otro show que realizó la activista de Voluntad Popular (VP), Lilian Tintori, hace unos meses atrás. En aque momento, la misma CPI emitió un comunicado desmintiendo haber recibido una denuncia formal, ya que esos no son los canales regulares para hacerlo.
También, legisladores y expertos en la materia de la oposición señalaron a Ortega Díaz que en todo caso debió acudir ante el denominado “TSJ en el exilio” y no a La Haya directamente.
Es evidente que esta aparición mediática de Ortega Díaz, justo el día de las reuniones preparatorias para el diálogo nacional entre el Gobierno Bolivariano y la oposición, solo buscaba entorpecer el desarrollo de las conversaciones, objetivo en el que no logró ningún éxito.
T/ Redacción CO
F/ Agencias
Caracas