Las sanciones o medidas coercitivas limitan al Estado venezolano en un 98% los recursos financieros que requiere el país para llevar adelante el plan productivo e impide la importación de aquellos alimentos que no se producen en el país
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El Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela participó ayer en la reunión hemisférica de ministros y secretarios de Agricultura, a través de una videoconferencia convocada por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO); y exigió la supresión de las sanciones coercitivas unilaterales que afectan la adquisición de insumos para la producción de alimentos en el país.
En su intervención, el ministro del Poder Popular para la Agricultura Productiva y Tierras, Wilmar Castro Soteldo, planteó los desafíos para el ciclo de siembra de mayor demanda de producción que inicia esta semana en Venezuela, “en medio de una gran batalla contra la pandemia del coronavirus Covid-19, y en medio de severas y criminales sanciones de carácter comercial, financiero y naval”.
Destacó que “estas medidas coercitivas limitan al Estado venezolano en un 98% los recursos financieros que requiere el país para llevar adelante el plan productivo, mientras, por otra parte, impide la importación de aquellos alimentos que no se producen en el país”.
La videoconferencia sirvió además para conocer detalles de las políticas públicas, acciones realizadas y por realizar en favor de garantizar alimentos a los pueblos del continente, a precios convenientes y considerando el menor riesgo a la salud de los agricultores y colaboradores.
ACCIONES CONCRETAS
En este sentido, el ministro Castro Soteldo aseveró que desde el gobierno de Venezuela se ejecuta una serie de acciones para el desarrollo de 18 grandes programas de producción y abastecimiento, entre los cuales, destacó los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP), un programa de distribución de alimentos a domicilio implementado por el Ejecutivo nacional que atiende a más de 6 millones de familias en todo el país, alrededor del 78% de las familias venezolanas.
A la par de este programa, se implementan planes de financiamiento a tasas de interés prácticamente inexistentes para fortalecer la asistencia técnica y científica a los campesinos en el medio rural y urbano, afirmó.
El ministro venezolano elevó una solicitud de que, como resultado de la reunión y para que se cumplan las propuestas formuladas en ella, se haga una declaración conjunta que condene y solicite la supresión de sanciones unilaterales de cualquier país contra otro. “Para que permitan producir de manera libre, autónoma e independiente los alimentos que necesitan nuestros países y el resto de los países del mundo”, agregó.
En la reunión también estuvieron presentes el ministro del Poder Popular para Relaciones Exteriores, Jorge Arreaza, y la ministra del Poder Popular de la Agricultura Urbana, Gabriela Peña; “con el objetivo de proyectar estrategias coordinadas de respuesta en materia alimentaria ante los retos del #Covid_19 y pese a las criminales sanciones”, escribió Arreaza en Twiiter.
Vale recordar, que el Gobierno de Venezuela y la FAO, suscribieron en marzo pasado, nuevos acuerdos orientados a fortalecer las capacidades técnicas del Estado venezolano y beneficiar a las poblaciones rurales más vulnerables de los estados Mérida, Trujillo, Portuguesa, Miranda y Guárico, situados en varias regiones del país.