La policía iraní puso fin a las incursiones en la embajada del Reino Unido protagonizada este martes por grupos de estudiantes que rechazan la intervención del país europeo en las políticas de desarrollo nuclear del país islámico.
El ministerio de Asuntos Exteriores iraní calificó como lamentable el suceso que implicó la quema de la bandera británica en la sede diplomática ubicada en la capital, Teherán, y el saqueo de documentación.
La cancillería agregó que los actos de violencia ocurrieron «a pesar de los esfuerzos de la Policía para evitarlos y del refuerzo de las medidas de protección de la Embajada», reportó la agencia de noticias Irna.
Un día antes, Irán anunció que reducía sus relaciones diplomáticas con Reino Unido por las sanciones del gobierno británico contra Teherán sobre el programa nuclear con fines pacíficos que adelanta el país persa.
El ministro de Exteriores inglés, William Hague, advirtió que este acto tendrá consecuencias «muy serias», informó EFE.
Los estudiantes insisten en que el embajador británico sea expulsado del país y las relaciones se rompan totalmente.