El gobierno de Panamá apoyará a Zona Libre de Colón (ZLC) en gestionar nuevos mercados como el cubano, para desarrollar mayores ventas, dijo el presidente Juan Carlos Varela durante festejos patrios en Colón.
Al responder preguntas de los periodistas, el mandatario dijo que la política de su administración es analizar primero la ley Colón puerto libre, mediante la cual se extenderá la zona franca a 16 calles de la ciudad, destinadas al comercio minorista.
También se refirió a la necesidad de abrir nuevos mercados, en lo cual el Gobierno Central puede cooperar, afirmó.
Solo después es que se verá la nueva ley orgánica de la ZLC y otras similares y posteriormente el tema impositivo que, según los empresarios del enclave, incrementan los costos de operación e hizo perder competitividad a las mercancías procedentes de esta área aledaña a la urbe atlántica.
Manifestaciones recientes de usuarios de la ZLC y sus empleados responsabilizaron al Ejecutivo por la actual crisis económica que atraviesan, la cual se refleja en un descenso constante de los ingresos desde el 2013 hasta la fecha.
Varela reafirmó que el tema fiscal no es la causa, porque ninguna empresa subsiste por reducir gastos, sino que crecen cuando aumentan sus ventas y recuperan mercados; e insistió que el problema de la ZLC es de mercados y se comprometió a trabajar juntos por resolverlo.
Cifras de la Contraloría General de la República fijan el valor de las reexportaciones de esta zona franca en cinco mil 580 millones de dólares durante los primeros seis meses de 2015, ocho por ciento menos que en igual período de 2014.
No obstante, el paulatino retroceso económico del enclave, a pesar de la privilegiada posición geográfica en la entrada atlántica del Canal de Panamá, pudiera indicar el final de una coyuntura continental que permitió su crecimiento vertiginoso.
Al observar el valor de las importaciones en 2011, el 74,6 por ciento del mismo se originó principalmente en la República Popular de China, mientras el 92,4 por ciento de las reexportaciones fue a Latinoamérica y el Caribe, llamó la atención el economista panameño Juan Jované.
Por tanto, el académico niega las tesis manejadas por el Gobierno y los empresarios, como causas de la situación de la segunda zona franca más grande del mundo, después de Hong Kong.
Este papel logístico subordina a la ZLC a coyunturas externas, pues hay desaceleración en China y contracción de la economía regional, al punto que la Comisión Económica para América Latina y el Caribe pronostica este año un decrecimiento regional de 0,3 por ciento, y es lógico que sus efectos se sientan con fuerza en Colón.