“A pesar de las situaciones adversas y constantes asedios contra nuestro país, existe la plena determinación y voluntad política del Gobierno Bolivariano para avanzar en la consecución de los objetivos de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible”, afirmó el embajador venezolano ante la ONU, Samuel Moncada, en el foro político de alto nivel auspiciado por el Consejo Económico y Social de la ONU.
Moncada indicó que incorporarán a esta tarea los esfuerzos nacionales de las comunidades, del poder popular organizado, entre otros actores, y que además tratarán de empoderar a los grupos sociales más vulnerables.
“La implementación de la Agenda 2030 requiere del esfuerzo de todas y todos, y Venezuela reafirma hoy su firme disposición para trabajar en este sentido, en pro de una agenda inclusiva y resiliente, que refuerce el compromiso de todos con la erradicación de la pobreza y el logro del desarrollo sustentable, en la que se integren de manera equilibrada las dimensiones sociales, económicas y ambientales y que restablezca el espíritu de solidaridad y trabajo con un profundo sentido social”, precisó el embajador Moncada.
Recordó que en 2016, Venezuela fue una de las primeras naciones en cumplir con la presentación nacional voluntaria ante dicho foro, y mencionó los avances en el proceso de integración de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible al plan nacional y al plan pobreza cero para 2019 que adelanta el Gobierno del presidente Nicolás Maduro Moros.
“La imposición de medidas coercitivas unilaterales fueron rechazadas por los jefes de Estado y de Gobierno de todo el mundo al adoptar la Agenda 2030 en 2015 y, a pesar de ello, se han intensificado en contra de Venezuela, en una constante búsqueda de afectar la estabilidad económica y política de nuestro país, y cuyo fin ulterior es propiciar el cambio del Gobierno legítimo, constitucional y democráticamente electo por el pueblo venezolano”, denunció Moncada.
Precisó que debido a los cambios de la realidad global y ataques contra los principios del multilateralismo, el sistema de Naciones Unidas tendrá como desafío enfrentar las injusticias globales, como el colonialismo, la guerra, el ataque a la soberanía e imposición de medidas coercitivas unilaterales, las cuales son contrarias a los principios consagrados en la Carta de la ONU y a las normas del Derecho internacional.