Un grupo de estudiantes universitarios llegaron ayer hasta la sede de la Embajada de Cuba en Caracas, con el objetivo de entregar un documento en el que expresan su descontento por la supuesta “injerencia de ese país en las filas militares de Venezuela”.
Unas 20 personas se reunieron en la Plaza Alfredo Sadel de Las Mercedes, para luego caminar hasta la sede diplomática ubicada en el municipio Baruta.
Las y los caminantes llegaron al lugar de forma pacífica y fueron apoyados por vecinas y vecinos del sector. Algunos habitantes de la zona pidieron a los integrantes de la Guardia Nacional Bolivariana (GBN) que no los reprimieran, pese a que observaron como los funcionarios militares colocaron una fila para resguardar la voz.
Con la dirigente opositora Gabriela Arellano a la cabeza, las y los estudiantes llegaron con pancartas y gritos en los que enunciaban su negativa “a vivir en una dictadura como la cubana”.
Arellano explicó que en el documento se expresa el descontento por la injerencia -en su criterio- del “castrocomunismo”. “Vemos con preocupación como nuestra GNB recibe directrices de los cubanos. Basta con ver la represión y la manera cómo responden a las manifestaciones de los estudiantes”, puntualizó al asegurar que en el país “hay militares castrocomunistas”. Arellano agregó que sus luchas no son contra el pueblo de Cuba, sino contra los militares que -según sostuvo- están en el país.
SIGUE EL RECLAMO
La manifestación llegó hasta una cuadra de la embajada, lugar en la que estaba el muro de protección de la GNB. Hasta ese lugar se acercó el comandante Carlos Ramírez, de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), quien recibió el documento para hacerlo llegar a los funcionarios diplomáticos cubanos.
Arellano destacó la gestión de Ramírez. El funcionario entregó la carta y se devolvió a donde estaban los estudiantes para avisarles que el trámite ya se había hecho. Con la carta entregada, el grupo de estudiantes entonó el Himno Nacional, para luego avisar que continuarán con las acciones de calle en los próximos días.
APOYO
En la actividad se dieron cita varios medios de comunicación internacionales, además de vecinos que también entonaron el himno con los jóvenes.
Cuando faltaban pocos minutos para llegar, tres señoras de avanzada edad esperaban a los manifestantes, con pancartas, en la esquina de la calle que da a la embajada.
El tráfico nunca se interrumpió. La mayoría de los carros que pasaban tocaban corneta en apoyo a la iniciativa de los jóvenes.
“Debemos salir todos los venezolanos. La mayoría de esos funcionarios (GNB) están disfrazados ya que hablan con acento cubano; por eso, a los estudiantes debemos apoyarlos”, decía una de las vecinas del sector, quien luego invitó a “todos los venezolanos a luchar por su libertad de forma pacífica”.