El canciller Jorge Arreaza confirmó este jueves que el diputado de derecha Juan Guaidó se encuentra alojado en la embajada de Francia en Venezuela, hecho que calificó como una vergüenza para la diplomacia.
«Son graves violaciones pero nosotros-como Venezuela- si respetamos el derecho internacional, no podemos ingresar a una residencia de un embajador de cualquier país y que la justicia se lleve por la fuerza», afirmó durante una entrevista la emisora Unión Radio.
Indicó que el gobierno venezolano espera una rectificación de los gobiernos de España-que mantiene en su sede al prófugo Leopoldo López-y de Francia donde se encuentra Guaidó.
En tal sentido pidió a ambos gobiernos europeos «que cumplan con las leyes del Estado receptor y entreguen a los prófugos a la justicia venezolana».
Arreaza sumó que la situación de ambos dirigentes opositores en las sedes diplomáticas es profundamente irregular. «Es una vergüenza para diplomacia de España y de Francia lo que ha ocurrido, eso les va a pasar factura (…)», sostuvo.
Reclamos diplomáticos
El ministro de Exteriores señaló que el Ministerio Público y el Poder judicial tomarán «las acciones que tengan que tomar según su buen criterio» sobre el caso Guaidó.
«El gobierno francés sabe muy bien cúal es la posición del Estado venezolano al respecto, habría preguntarles qué locura es esta», dijo sobre las acciones de los dirigentes desde territorio extranjero en violación a las normas internacionales.
Señaló que Venezuela es respetuosa de las leyes y ha hecho los reclamos diplomáticos correspondientes. «Todos los días hacemos los reclamos a estos países (…) pasarán a la historia todos estos gobiernitos como un mal recuerdo».
Caso López
«Leopoldo López desde la embajada de España sigue conspirando, él tomó decisiones para llevar adelante la operación Gedeón, él es el jefe de Guaidó, son graves violaciones», puntualizó.
El pasado 20 de marzo, el presidente Nicolás Maduro denunció que López estaba utilizando las instalaciones de la embajada española para conspirar contra Venezuela y pidió al canciller «iniciar gestiones ante el Gobierno de España para que tome cartas en el asunto».
El dirigente opositor cumplió un año en condición de «huésped» en la embajada de España en Venezuela tras participar en la intentona golpista el pasado 30 de abril de 2019.
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