El maestro de la música folclórica cantó por más de una hora|Gualberto Ibarreto enamoró en Los Próceres

Gualberto Ibarreto

Una multitud esperaba desde temprano a que comenzara el concierto. La gritería de las guacamayas se mezclaba con el afán habitual de las pruebas de sonido. A las 5:00 PM el obelisco de Los Próceres estaba atestado de gente que se desbordó por los alrededores para ubicar un buen puesto y disfrutar de la voz de Gualbeto Ibarreto. Su interpretación comenzó con el tema “Era ella”, cuyas letras encendieron la emoción de las y los asistentes.

Guácara” continuó el repertorio, canción que le arrancó al vocalista un pensamiento: “Le dedico esta estrofa a Venezuela. Recuerden cuando los recursos del petróleo no llegaban al campesino”. Seguidamente entonó: “El hijo del campesino / el muchacho barrigón/ cuando el hambre lo atormenta / lleva mi cuerpo al fogón”. Con este tema de Luis Mariano Rivera hechizó al público que coreaba las estrofas con emoción e intensidad, y casi opacaba el sonido de la tarima.

Luego cantó “Me conformo con verte” y la “Bikina”, temas que le sirvieron de preámbulo al “bochinche” que se armó cuando interpretó junto a Elena Gil el tema “El negro y el catire”, composición de Simón Díaz y Graterolacho. En el interludio el cantante descansó por unos momentos, mientras los músicos William García (mandolina), Marcos Mayaudón (cuatro) y Vianey Ramírez (bajo) tocaron un tema instrumental.

“Qué bueno que las instituciones usen el talento de Cecilia Todd para construir una nueva Venezuela”, dijo el artista al invitar a la vocalista al escenario, mientras ella replicaba: “Me siento feliz de compartir con Gualberto, uno de los mejores amigos del mundo”. La intérprete de emblemáticas canciones como “Constancia de un pescador” agradeció al público el cariño hacia las voces del folclor.

El concierto prosiguió con otras interpretaciones como “Calamar”, “Ah cuerpo cobarde”, “La Carta” y “María Antonia”, canción que hizo saltar de sus asientos a niñas, niños, mujeres y hombres a bailar y corear con el maestro la jocosa letra de José Ramón Villarroel. Antes de bajarse del escenario expresó: “Quería hoy el amor de ustedes, gracias por acompañarme. Buenas noches”.

HUMANO Y DIVINO

Ibarreto es uno de los cantantes más queridos del universo popular venezolano. El originario de El Pilar, estado Sucre, es un paradigma de la canción nacional que aprendió su oficio de manera autodidacta. Su discografía abarca unas 15 producciones y su trayectoria profesional también ha incluido la producción y hasta el cine.

Durante el concierto en Los Próceres, el artista confesó la reciente muerte de su madre y también le tomó un momento de reflexión con el público sobre situaciones que ha enfrentado en la vida y que hoy ha podido superar. “Gracias a Dios por esta oportunidad”, dijo emocionado. Su voz se quebraba al admitir que “era adicto al alcohol”, aunque desde hace tres años no toma. El público respondió espontáneamente: “Te queremos, sigue adelante”. La resolución de Ibarreto por superar este problema trasciende la naturaleza humana y lo ubica bien alto en el firmamento de las estrellas nacionales.

T/ Heberto Hernández
F/ María Isabel Batista