Gustavo Maza: “Le metí una clavada a Carl Herrera”

“La Liga Profesional de Baloncesto (LPB) es parte de mi vida. La mitad de mi vida he estado con ella, en la Liga Especial y ahora en la LPB. Es parte de mí y de mi familia”, señaló el hoy retirado Gustavo Maza, con una trayectoria ligada prácticamente en su totalidad a la divisa de Cocodrilos de Caracas.

El caraqueño se inició con la Liga Especial y aún es parte activa de la LPB: “Yo vengo de una familia de peloteros. Mi tío es Gustavo Gil, mi padrino es César Tovar. Mi papá fue muchos años entrenador en los Criollitos de Venezuela y por supuesto yo jugué béisbol. Un día me metí a la cancha de baloncesto y allí comencé a dar los primeros pasos. Jugaba simultáneo béisbol y baloncesto, ya en juvenil tomé la decisión de seguir con el básquet. Para mí fue la decisión más importante. Estuve a punto de firmar para el béisbol con Emilio Carrasquel”,

El excatcher, tercera y primera base en los diamantes en sus comienzos en el baloncesto también estuvo marcado por influencias de peso: “Jugué en el YMCA de Catia, donde asistí en casi todas las categorías a los (campeonatos) nacionales. Eso antes era un honor. Me crié con Yván (Olivares), ‘Tulo’ (Ramón Rivero), Melquiades (Jaramillo). Poco a poco fui surgiendo. Fui a un (campeonato) suramericano en Uruguay con Luis Sosa, entre otros y de ahí firmé con Caracas”.

“Yo estaba en el liceo, el profesor (Francisco) ‘Paco’ Diez me fue a buscar. Fui a entrenar con el Caracas en el (Instituto) Pedagógico (de Caracas). Firmé escondido y mi familia se enteró cuando salió en el periódico. Al principio no les gustó, pero con el tiempo me apoyaron. Incluso a toda la familia y de ahí salió mi primo, Armando Becker. Creo que soy el único que he vestido todas las camisetas de Caracas. Con Cocodrilos no jugué, pero si trabajo con ellos”, recordó el jugador que debía fajarse en la pintura en la defensa con los importados contrarios.

SIN CETROS

Solo la dinastía de Margarita alejó a Maza del título como jugador: “Fui a cuatro finales (como jugador) y las cuatro las perdí contra Guaiqueríes (de Margarita). Nosotros teníamos buen equipo, pero ellos estaban más compenetrados. Fuimos dos veces a siete juegos”.

Si ‘Paco’ Diez lo llevó al baloncesto organizado, también esta leyenda de nuestro deporte, lo aupó a los banquillos: “Estuve con Caracas y después me cambiaron a Panteras (de Miranda) y ‘Paco’ Diez me dijo que si quería trabajar con él. El mejor entrenador de Venezuela te pide eso y no lo vas a dejar de lado. Ya me había graduado en el (Instituto) Pedagógico de Caracas y estaba al final de mi carrera. Ya voy para 17 años como técnico en la liga. Trabajé con ‘Paco’ en Marinos (de Anzoátegui) en la famosa final de 1995 contra Panteras. Después de allí, me fui a Cocodrilos hasta el sol de hoy”.

El mejor momento de Maza en su historial como jugador fue ante un NBA: “En un juego contra (Bravos de) Portuguesa. Anoté 21 puntos y le metí una clavada a Carl Herrera. Un foul y vale. Era el único recurso que me quedaba. Si no la clavaba, seguro me daba tapón”.

Para el técnico con cuatro títulos desde la asistencia en los banquillos, “hay que tener constancia y mucho trabajo. A veces es fácil llegar y difícil mantenerse. Es la mezcla de responsabilidad, trabajo y constancia, lo que da oportunidad al éxito”.

Gustavo Maza vistió los uniformes de la divisa Caracas bajo las denominaciones Ahorristas, Retadores, Telefonistas, Académicos y Estudiantes: “Doy las gracias a la LPB por esta iniciativa con los exjugadores. Nos lo merecemos. Son momentos de refrescar quiénes fuimos, las anécdotas y recordar”.

Por otra parte, hoy desde las diez de la mañana, la LPB convoca a todos sus miembros accionistas para una asamblea general extraordinaria con el fin de considerar y definir aspectos organizativos del próximo campeonato de la LPB 2021.

En esta asamblea se definirá la fecha de inicio y el calendario pertinente de la próxima temporada de la LPB, camino a sus 50 años de existencia.

T/ Redacción CO
F/ Cortesía LPB
Caracas