Lo han denominado Uromunna naherba|Hallan una nueva especie de crustáceo en Galicia

Un grupo de científicos de la Universidad de Vigo y el Australian Museum ha encontrado en la ensenada gallega de O Grove (Pontevedra) un nuevo ejemplar de crustáceo endémico de Galicia. Lo han denominado Uromunna naherba y pertenece al orden de los isópodos (superorden Peracarida), el más diverso de crustáceos.

“Lo llamamos en gallego na herba (‘en la hierba’ en castellano) porque lo encontramos en praderas de fanerógamas marinas, o lo que es lo mismo, en hierbas submarinas”, declara a Sinc Patricia Esquete, coautora del estudio en la Universidad de Vigo y que trabaja actualmente en la Universidad de Aveiro (Portugal).

Estos peracáridos están distribuidos en toda clase de medios, especialmente en los marinos, aunque también existen especies terrestres y dulceacuícolas. Uromunna naherba mide entre 0,6 mm y 1,5 mm de longitud y vive tanto entre las hojas de las plantas como en los rizomas –tallo subterráneo–, aunque las hembras que portan huevos tienden a vivir más en estos últimos.

“Uromunna naherba no tiene aletas con las que nadar ni con las que quedarse suspendida en el agua para dejarse llevar por la corriente, por lo que no se desplaza en grandes superficies. Solo los adultos de algunas de estas especies, son capaces de nadar, aunque raramente largas distancias”, explica la investigadora.

Una particularidad de los peracáridos en general, y de los isópodos en particular, es que ninguna fase o estadio de su ciclo de vida tiene una función dispersiva. Es decir, en ningún momento el animal se desplaza a grandes distancias, ya sea para colonizar nuevos hábitats o para encontrar nuevos sustratos. Por eso, se trata de una especie que no nada, sino que camina sobre el fondo marino, tanto sobre algas como plantas.

Esto, añadido a que se trata de una especie de reducido tamaño y limitados desplazamientos hace que sea proclive a la especiación y que los endemismos ocurran con frecuencia. “De hecho, la evolución constante de los peracáridos hace que aparezcan numerosas nuevas especies”, asegura Esquete.

“Como no pueden hacer grandes desplazamientos en poco espacio de tiempo –añade la experta– los individuos de una población se reproducen entre ellos, sin que haya mezcla entre poblaciones. Por lo tanto, las mutaciones genéticas se diseminan rápidamente dentro de la población pero no se extienden a poblaciones alejadas”. Así, con el paso del tiempo, esa población habrá acumulado tantas mutaciones que la diferencien de otras que se convertirá en una especie nueva.

BUEN  TIEMPO, MAYOR REPRODUCCIÓN

La reproducción de Uromunna naherba tiene lugar a lo largo de todo el año. Sin embargo, los científicos observaron que las hembras ovígeras –portadoras de huevos– son más frecuentes a finales de primavera y en verano. Este hecho coincide con el momento del ciclo anual de la planta en el que las hojas y los rizomas alcanzan su máximo tamaño, y pone a su disposición mayor sustrato y alimento.

Según la investigadora, existe una falta de información sobre la historia natural de los peracáridos porque no son comestibles y, por tanto, no tienen interés comercial. La nueva especie se encontró en las praderas submarinas en densidades de hasta 900 individuos por metro cuadrado en algunos casos.

“Realmente no buscábamos nuevas especies. Lo normal es que aparezcan cuando se toman muestras para un estudio de carácter ecológico”, subraya Esquete.

OTRA ESPECIE ENTRE ESPAÑA Y PORTUGAL

El equipo de investigación también encontró otra especie en las muestras recogidas. Se trataría de un ejemplar del género Apseudopsis difícil de identificar porque es muy diferente a las especies ya conocidas.

“Fue una sorpresa, porque es un género muy frecuente y abundante en las costas europeas. Se considera que la fauna de estas costas es bien conocida, pero estamos viendo que no es así. De hecho, es esa afirmación la que genera confusión e identificaciones incorrectas, y hace que no se avance”, afirma la científica.

La nueva especie, un peracárido conocido como Apseudopsis adami (orden Tanaidacea), mide en edad adulta entre de 4,5 mm y 5 mm. Al contrario que Unamunna naherba, no es endémica de Galicia y se ha encontrado por toda la costa hasta el Algarve, al sur de Portugal.

“Simplemente había pasado desapercibida por su parecido con la que se asumía era la única especie del género presente en esta zona”, concluye Esquete.

Fuente/Agencia Sinc
Foto/Archivo