Este jueves, el Congreso español vota acerca de una moción de censura presentada por el PSOE. El denominado Caso Gürtel destapó el sistema de corrupción que permitía el financiamiento ilegal del gobernante Partido Popular
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Mariano Rajoy afronta este jueves una moción de censura que podría acabar con su mandato. Su deslave político comenzó a partir de la sentencia judicial de la Audiencia Nacional sobre el caso Gürtel. Allí quedó demostrado que el Partido Popular que lidera se había financiado con recursos provenientes de corrupción.
La moción de censura fue propuesta por la mayor bancada de oposición, el PSOE, y aún no se tiene certidumbre si logrará mayoría. La llave de la votación la tiene el Partido Nacionalista Vasco (PNV), cuyas posturas han sido ambivalentes.
El PSOE, Unidos Podemos y los soberanistas catalanes ya han anunciado que votarán a favor de que Rajoy se vaya. También el grupo Compromís de la Comunidad Valenciana. Por su parte los mellizos del PP, el partido Ciudadanos dijo que no acompañaría la moción.
De prosperar la moción, Rajoy quedaría destituido de inmediato. Según la legislación española, se conformaría un nuevo gobierno. En este caso, la mayoría podría ser lograda por Pedro Sánchez, líder del PSOE.
Si Sánchez resulta designado como nuevo Jefe de Gobierno, podría culminar la legislatura hasta el año o convocar a elecciones adelantadas. Todo ello dependerá de las negociaciones que surjan en el hipotético caso que se trunque definitivamente el gobierno de los populares.
¿Y si fracasa la moción contra Rajoy?
Si la moción contra Mariano Rajoy fracasa, es probable que Unidos Podemos proponga una nueva en torno a adelantar los comicios. Es probable que allí sí se sume Ciudadanos. La organización de derecha especula por su momento político, pues las encuestas los han mostrado como la fuerza que ha tenido mayor crecimiento.
Durante todo el día de ayer los medios españoles también afirmaron que existían rumores de una posible dimisión de Rajoy. Ayer el Mandatario asistió al Congreso para enfrentar una llamada “sesión de control”. El ambiente fue nebuloso, por primera vez se notaba contra la pared al Jefe de Gobierno.
La incógnita sobre como votará el PNV se mantendrá hasta el final. La dirección de este partido señaló que esperarían a última hora para anunciar su decisión definitiva. Son horas de zozobra para Rajoy.