En un mundo casi apocalíptico, un grupo de jóvenes que ha logrado sobrevivir en medio de la crueldad y la anarquía, experimentará un acontecimiento que podrá a prueba aún más su sensibilidad y su capacidad de conservar la humanidad. Esta es parte de la historia de Piel mercurio, del dramaturgo inglés Philip Ridley, con la dirección de Diana Volpe, que se estrenó anoche en La Caja de Fósforos y se presentará en este espacio cultural de Bello Monte durante seis semanas.
Uno de los primeros argumentos de la obra, la ingesta de mariposas como droga para escapar de la realidad, se desvanece a medida que se revela el trabajo de los hermanos Elio y Darwin, quienes toman un apartamento en ruinas para preparar una “fiesta” con un “Obsequio” humano, acicalado por Lola para su destino final, un desenlace advertido por Naz, un joven que decide unirse al grupo sin saber que le depara esta aventura organizada para satisfacer la “fantasía más salvaje” del Invitado especial, un ejecutivo o adinerado.
Aunque la paga para el atroz acontecimiento parece ser lo suficientemente alta para justificar la violencia en la lógica de este juego macabro, Spinx, otro de los miembros de la banda, dejará claro que lo importante no es el dinero sino la información que revelará el Invitado para salvar las vidas de todos. Durante el desarrollo de la pieza el público sentirá la tensión, la angustia y curiosidad por saber cuál será el final inesperado antes de que caiga la noche.
En este montaje se incluyó también la figura de la Duquesa, un personaje que a ratos distrae la atención al recuperar la memoria y sirve para completar la historia del origen de los hermanos Elio y Darwin.
RAZONES
La directora de esta puesta en escena, Diana Volpe, explicó que decidió hacer este montaje tan duro porque le preocupa qué es lo que nos hace seres humanos, qué es lo que hace mantener la humanidad y al mismo tiempo cometer las cosas más terribles en el mundo, los crímenes más espantosos.
También le motivó que Darwin, la Duquesa y varios de los diálogos de los personajes se plantean momentos sobre la pérdida y la recuperación de los recuerdos. “Este una preocupación recurrente del autor Philip Ridley ¿Qué sucede cuando ya hemos manipulado, borrado el pasado o creado un pasado distinto, cuando ya no tenemos referencias de donde venimos?”, comentó la directora en declaraciones a la prensa.
Volpe resaltó que la obra presenta “situaciones terribles”, pero muchas de ellas reales, como el monólogo en el que Naz cuenta el asesinato de su madre y su hermana en un supermercado, un testimonio real de alguien que vivió el crimen en Ruanda, cuando le quitaron la vida a 3.000 persona a “machete limpio”.
“Cuando examinamos la crueldad en el mundo vemos a Ruanda, a 200 niños asesinados en Afganistán y nos parece terrible, pero cuando esto pasa en nuestro vecindario ¡Hay! No podemos lidiar con eso ¡Hay! Es demasiado fuerte. Entonces, esta es una manera de conectarnos con eso que está pasando en el mundo entero”, ilustró.
A pesar de que Piel mercurio lleva la sensibilidad a una situación extrema ante un mundo destruido, la amenaza a la existencia y la muerte, Volpe recuerda que para Philip Ridley esta obra trata también sobre el amor, el sentimiento que “une a un grupo de gente que se juntó de manera fortuita y creó otra familia y se quiere. La gran pregunta que me hago es ¿Hasta dónde estamos dispuestos a llegar para sobrevivir”.
Originalmente, la obra está ambientada en Londres pero en la producción de Hebu Teatro y La Caja de Fósforos no está definido el lugar, en búsqueda de la universalidad, de la puerta en escena como una mirada al mundo entero. Sin embargo, en este montaje se deja ver origen del dramaturgo, como las alusiones a los disturbios de la década de los noventa en la capital inglesa. Igualmente, se realizaron algunos cortes y adaptaciones.
Otra de las razones por las que Diana Volpe seleccionó esta obra para representarla en escena fue porque le interesa trabajar con actores jóvenes, como este elenco con interpretaciones bien logradas de Gabriel Agüero como Elio, Oswaldo Maccio en el rol de Lola, Elvis Chaveinte en los zapatos de Spinx, Ernesto Campos en la interpretación de Naz, Eliú Ramos como Darwin, Fernando Azpúrua como el Obsequio, Alexander Rivera de Invitado Especial y Citlalli Godoy en el papel de la Duquesa.
La directora celebró el esfuerzo del reparto en las tablas, que logra hacer una interpretación creíble en tiempo real, aproximadamente durante una hora y 40 minutos, luego de iniciar los ensayos en septiembre del año pasado.
“Para ellos fue terrible hacer esto (la obra), ha sido un trabajo fortísimo. El público, el último juez, dirá al final. Creo que ellos (el elenco) está muy compenetrado con sus papeles”, manifestó.
Volpe adelantó que intentan incluir Piel mercurio en la programación de la próxima edición del Festival de Teatro de Caracas.