El periodista y político José Vicente Rangel alertó que las acciones promovidas por sectores de la derecha venezolana, que incluyen desabastecimiento, estímulo a la inflación y auspicio a la conspiración, apuntan a la caotización del país y, por tanto, el país reclama medidas urgentes para preservar la democracia.
Indicó que ningún gobierno puede permitir que se desmoronen las instituciones y haga crisis el Estado de Derecho. «Venezuela está arribando a una situación de ruptura que reclama, para preservar la democracia, medidas urgentes por parte de los que tienen la responsabilidad de defender los valores y la convivencia nacional», dijo el experimentado comunicador social en su programa José Vicente Hoy, transmitido este domingo por la televisora privada Televén.
Rangel advirtió que el dilema actual que se plantea en la nación es entre democracia y antidemocracia. «Desabastecer deliberadamente el país, manipular políticas económicas, jugar con la moneda, estimular la inflación y auspiciar la conspiración con discursos y actitudes provocadoras traza una raya que apunta hacia la caotización del país», enfatizó en alusión a las acciones promovidas por la derecha.
El Gobierno del presidente de la República, Nicolás Maduro, ha denunciado la existencia de una guerra económica por parte de la derecha, que se ha expresado en fallas de abastecimiento, especulación y acaparamiento, entre otras.
Para Rangel, desde 1999, con llegada a la jefatura del Estado del líder de la Revolución Bolivariana, Hugo Chávez Frías, se ha planteado en el país una contradicción: de una lado, aquellos que se resisten a aceptar los cambios políticos y económicos promovidos por el proceso socialista; y, del otro, los que apoyan esa transformación.
Puntualizó que son los primeros los que promueven el quebrantamiento de las reglas de juego y el desconocimiento del Estado de derecho, con un comportamiento abiertamente antidemocrático.
«Es imposible aceptar una contradicción que tarde o temprano termina por hacer crisis», apuntó.
Recordó que en los gobiernos de la cuarta República se «condenó a la mayoría a la miseria y, en lo económico, impuso una política de corte neoliberal que desmanteló el aparato productivo».
Con la Revolución de Chávez, resaltó Rangel, se desmontó ese Estado terrorista y los venezolanos recuperaron sus derechos.