Festejó con un espectáculo de fuegos artificiales de 12 minutos |Sydney da la bienvenida a 2017

Australia dio hoy la bienvenida al nuevo año con un impresionante espectáculo de fuegos artificiales en Sydney que rindió tributo a artistas fallecidos en 2016 como el músico David Bowie o el actor Gene Wilder.

A la medianoche local (13:00 GMT) se encendió un castillo de fuegos artificiales con la forma del planeta Saturno, en honor al cantante británico.

Mientras sonaba su tema «Space Oddity», fuegos artificiales rojos estallaron con la forma de naves espaciales sobre la ciudad australiana.

También el actor Gene Wilder tuvo su homenaje, con fuegos de artificio en forma de caramelos y la música de la película de «Willy Wonka & the Chocolate Factory», que protagonizó en 1971.

Millones de personas contemplaron entusiasmadas desde la bahía de Sydney los 12 minutos de espectáculo pirotécnico que marcaron la entrada en 2017.

Se esperaba que mil millones de personas en todo el mundo siguiesen el evento a través de retransmisiones en vivo en Facebook y YouTube.

A primera hora del día, más de un millón de personas acudieron al puerto de Sydney a contemplar los fuegos artificiales en color púrpura que cayeron desde el puente del puerto al ritmo de la canción «Purple Rain», de Prince.

Fue el primer tributo musical a las grandes voces que desaparecieron en 2016 y que formaba parte del espectáculo de fuegos artificiales para toda la familia que se lanzan a las 21 horas (a las 10:00 GMT) en la ciudad australiana.

Con esta muestra previa se permite a los más pequeños participar en la fiesta sin tener que estar levantados hasta las 12 de la noche.

También hubo castillos pirotécnicos en diferentes parques y avenidas marítimas de la ciudad. Antes, bailarines aborígenes interpretaron una danza de bienvenida frente a la Ópera de Sydney.

Acudir a ver el despliegue de fuegos de artificiales en personas requiere planificación. Cientos de personas pasaron la noche del viernes al sábado haciendo fila para poder acceder los lugares más solicitados por las vistas cuando abrieron las puertas de acceso la mañana del sábado.

Los más de 100 mil petardos que se queman hoy tienen un valor de 4.8 millones de euros (cinco millones de dólares).

Los organizadores prometieron que sería el mayor espectáculo de todos los tiempos. La policía aseguró que no había amenazas de ataques, pero por primera vez se emplearon autobuses para bloquear las calles que dan acceso a las zonas peatonales.

De este modo se evitaron ataques como el ocurrido recientemente en Berlín o el de julio en Niza.

En Nueva Zelanda, Max Key, el hijo del ex primer ministro John Key, fue el DJ del espectáculo de fuegos artificiales en Auckland.

En Wellington el castillo de fuegos artificiales se realizó en la laguna y algunos se atrevieron a lanzarse al agua a medianoche.

A pesar de ser verano hacía frío y viento. Nueva Zelanda es uno de los primeros países en dar la bienvenida a 2017.

Par algunos países del Pacífico, las campanadas de año nuevo ya sonaron. Samoa celebró la llegada de 2017 a las (10:00 GMT), 19 horas antes que en Nueva York.

En Tailandia se prohibió el uso de fuegos artificiales para celebrar la llegada de Año Nuevo debido al año de luto decretado tras la muerte en octubre del rey Bhumibol Adulyadej.

Cuando termine al año se espera que cientos de miles de personas entonen una canción compuesta por el propio Bhumibol, seguida del himno real. En Kuala Lumpur miles de personas se reunirán en lugares como la Plaza Merdeka para recibir 2017 con bailes tradicionales y cánticos.

En la capital malasia también habrá quienes pasen la noche en el Kuala Lumpur City Centre (KLCC) viendo cómo los fuegos artificiales se reflejan en las ya de por sí resplandecientes Torres Petronas.

En las grandes ciudades de China no hay este año celebraciones oficiales para dar la bienvenida al Año Nuevo.

La policía aconsejó evitar las concentraciones de gente. En una estampida que se registró en el paseo marítimo de Shanghai poco antes de la medianoche murieron hace dos años 36 personas. La policía admitió más tarde que no había planificado la gran afluencia de personas.

No obstante el 1 de enero es festivo en la República Popular China, a pesar de que según el tradicional calendario lunar chino, el Año Nuevo comienza a finales de enero o principios de febrero. El 31 de diciembre, sin embargo, es una ocasión para salir de fiesta para los jóvenes en las grandes ciudades.

Los primeros en descorchar botellas son las islas Tonga, Fiyi, Nueva Zelanda y Australia.

F/La Jornada
F/AFP

Fue algo maravilloso poder vivir una experiencia como la de disfrutar del fin de año en Sydney. Nunca había visto nada igual.