Efectivos de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) en el estado Anzoátegui incautaron este fin de semana 36 bombas molotov, gasolina y cauchos en protestas suscitadas por grupos de choque financiados por la derecha en la ciudad de Lechería, municipio Diego Bautista Urbaneja.
La información fue suministrada este lunes por el jefe de la Región Estratégica de Defensa Integral (REDI) Oriente, Sergio Rivero Marcano, durante una rueda de prensa ofrecida desde el Comando de Zona Nº 52 de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), ubicado en el sector El Pensil de Puerto La Cruz.
Allí, precisó que parte del material y artículos para incitar a la violencia, por parte de los grupos violentos en la localidad, eran suministrados por tres ciudadanos, entre ellos un menor de edad, quienes fueron detenidos y están puestos a la orden de la Fiscalía.
Puntualizó además la retención de una ambulancia de una empresa privada, desde donde también suministraban material incendiario.
«Este bien fue puesto a la orden del Ministerio Público, y este órgano a su vez debe solicitar al Juez de Control que la ambulancia sea puesta a la orden de la oficina de Delincuencia Organizada y Financiamiento al Terrorismo, que depende del Ministerio del Poder Popular para la Defensa», dijo.
Acotó que la empresa está siendo sometida a una amplia investigación, para verificar la oficina, fondos y contratos que pueda generar con personas jurídicas a su alrededor.
De igual manera, se incautó un dingui que suministraba cauchos y gasolina, a través de los canales navegables del municipio Urbaneja.
«Estas son pruebas fehacientes de que hay personas que participan en actividades terroristas y en acciones de logística, de acuerdo a lo establecido en la Ley Orgánica Contra la Delincuencia Organizada y Financiamiento al Terrorismo», resaltó.
El jefe de la Redi Oriente dijo que se mantiene seguimiento al expendio de morteros y cohetones, con los cuales han resultado heridos los efectivos de la GNB en las últimas semanas, durante las protestas convocadas por la oposición en la región.
«Retuvimos de manera preventiva 650 morteros a una empresa, donde los libros de salida de material y el inventario está siendo revisado a fin de verificar si tienen o no vinculación con estas actividades violentas», dijo.