Corea del Norte y Corea del Sur celebraron este lunes el primer encuentro de un comité destinado a negociar la reanudación de actividades de su zona industrial conjunta de Kaesong, cinco meses después de que cerrara por una escalada de tensión entre ambos países. En esta reunión Corea del Sur exigirá compromisos firmes a Corea del Norte, según aseguraron funcionarios surcoreanos a la agencia Yonhap.
Este es el séptimo encuentro -tras seis encuentros fallidos celebrados en julio- para negociar la reapertura del complejo industrial conjunto, después de que Pyonyang (capital de Corea del Norte) decidiera cerrarlo en abril.
El comité, compuesto por cinco representantes de ambas partes, se sentó a negociar en Kaesong a las 10H00 locales (01H00GMT), con la agenda inicial centrada en el calendario de reapertura del complejo; sin embargo, ambas partes no lograron avanzar a finales de la sesión, indicó la agencia de noticias de Seúl (capital de Corea del Sur) Yonhap, y acordaron reanudar sus conversaciones durante la semana.
La agencia citó a un responsable surcoreano que indicó que Seúl pidió compensaciones para las empresas afectadas por el cierre. Añadió que Pyongyang pidió por su parte la reapertura inmediata del complejo.
Recientemente Corea del Sur ofreció al régimen norcoreano celebrar el encuentro de este lunes, tras amenazar con que sería la «última oportunidad» para alcanzar un acuerdo.
La delegación del Sur no aceptará «promesas vagas» de Corea del Norte y subrayará la necesidad de que Pyonyang ofrezca garantías si quiere que el complejo vuelva a operar, aseguraron funcionarios del Ministerio surcoreano de Unificación a Yonhap.
«El Gobierno encarará las negociaciones con el objetivo de satisfacer las expectativas de los surcoreanos», explicó el líder de la delegación surcoreana, Kim Ki-woong, funcionario del Ministerio de Unificación, minutos antes de arrancar la reunión.
El vicedirector de la Oficina General a cargo del distrito de Kaesong, Pak Chol-su, liderará al grupo norcoreano, en un encuentro que se celebra en el Centro de Asistencia General del polígono, situado en territorio norcoreano.
Kaesong, donde unos 54 mil trabajadores norcoreanos fabricaban productos para 123 empresas del Sur, cerró el 8 de abril, tras ocho años funcionando de manera casi ininterrumpida, después de que Corea del Norte retirara a sus obreros como parte de una intensa campaña de hostilidades contra Seúl y Washington.