El Director Nacional de Inteligencia de Estados Unidos, Almirante Dennis Blair, presentó un informe ante el Comité de Inteligencia del Senado de EEUU, en el cual se expresa un listado de posibles amenazas para la seguridad del país del norte. Este año, además de mencionar a Irán, Corea del Norte, Afganistán, Al Qaeda e Iraq, sus usuales sospechosos, el informe dedica un espacio significativo a Venezuela.
El documento expresa: “En países como Venezuela, Bolivia y Nicaragua, líderes populistas están caminando hacia un modelo económico y político más autoritario y centrista, y se han unido para rechazar la influencia de EEUU y sus políticas en la región. El Presidente de Venezuela Hugo Chávez se ha establecido como uno de los detractores principales a nivel internacional contra EEUU, denunciando al modelo democrático liberal y el capitalismo del mercado, y rechazando las políticas e intereses de EEUU en la región», lo que evidencia la intención hegemónica del imperio norteamericano, el cual califica de «amenaza» a la divergencia ideológica.
El informe, que dedica tres paginas al país caribeño, sentencia: “Venezuela: Liderando la fuerza regional anti-estadounidense”, e indica que “el presidente Chávez continúa imponiendo un modelo autoritario y populista en Venezuela que está socavando a las instituciones democráticas».
Sin embargo, el documento parece olvidar que en Venezuela se realizan constantes elecciones y existe un indiscutible aumento de la participación popular, evidenciada en el surgimiento de los Consejos Comunales, las Comunas, los Consejos Locales de Planificación y una serie de instrumentos que permiten al pueblo un mayor ejercicio de sus derechos democráticos.
El citado texto también se inmiscuye en el tema de las venideras elecciones a la Asamblea Nacional venezolana, lo cual representa una intromisión en los asuntos internos del país caribeño. Según el informe, Chávez «ha tomado otros pasos para consolidar su poder político y para debilitar a la oposición antes de las elecciones legislativas en 2010».
El informe anual de inteligencia de EEUU no solamente habla de temas internos de Venezuela, sino también externos. «En cuanto a la política exterior, la influencia regional de Chávez (…) Ha formado una alianza de líderes radicales en Cuba, Bolivia, Ecuador, Nicaragua, y hasta hace poco, Honduras», reseña el documento, dejando claro que la consolidación de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América, Alba, resulta incomoda para Washington.
En torno a los acuerdos suscritos entre Venezuela y Moscú, que dieron sustento a la compra de armamentos para la defensa nacional, el documento señala que dicha adquisición «preocupa particularmente a Colombia».
No obstante, el Director Nacional de Inteligencia de los Estados Unidos omite en su informe que son las siete bases militares norteamericanas instaladas en Colombia las que verdaderamente han despertado preocupación en los países de la zona, al punto que el año pasado, la Unión de Naciones Suramericanas, Unasur, realizó una cumbre extraordinaria para tratar el tema.
Según la investigadora Eva Golinger, «la importancia dada a Venezuela en este informe, evidencia que las acciones y operaciones de inteligencia y seguridad de Washington contra el gobierno de Hugo Chávez, incrementarán durante el 2010″.