La ministra de Justicia y Derechos Humanos de Honduras, Ana Alejandrina Pineda, reconoció el aumento de migrantes de su país hacia Costa Rica, quienes huyen de la inseguridad y la criminalidad.
Pineda, quien concluyó este miércoles una visita a la capital costarricense invitada por la Oficina local del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), se reunió con varias autoridades locales, entre ellas la directora de Migración, Kathya Rodríguez.
La Ministra subrayó que la tendencia migratoria tiene sus causas en la violencia y la delincuencia predominantes en Honduras, país que posee la tasa de homicidios más alta del mundo, con 85,5 por cada 100 mil personas.
Según un estudio publicado por el gubernamental Comisionado Nacional de los Derechos Humanos, en el período 2000-2012 en Honduras se contabilizaron 53 mil 622 muertes violentas.
De ellas, 20 mil 10 ocurrieron en los primeros 35 meses de gestión del presidente Porfirio Lobo (desde el 27 enero de 2010 a diciembre de 2012).
La titular reconoció que en su país existe un entorno de mucha inseguridad, en particular en zonas urbanas que se encuentran sitiadas por el crimen organizado, la extorsión y la actividad de pandillas.
Hechos delictivos como esos, dijo, obligan a un número cada vez más alto de hondureños a abandonar su país, alejándose de sus raíces, patrimonio y familia.
Destacó que el éxodo hacia Costa Rica se incrementó luego del golpe de Estado perpetrado en 2009 contra el presidente constitucional Manuel Zelaya, por lo que la cantidad de hondureños que pidieron asilo pasó de uno en 2008, a 26 al año siguiente.
Asimismo, informó que en lo que va de 2013 totalizan 22 sus conciudadanos que han solicitado refugio a las autoridades costarricenses.