Tropas iraquíes retomaron este domingo el control en las instalaciones gubernamentales provinciales de la ciudad de Ramadi, que estuvo durante mucho tiempo bajo el dominio de la organización terrorista autodenominada Estado Islámico (EI).
Los militares entraron en la sede del gobierno, después de varios días de combates por el control del centro de la ciudad.
Los mercenarios utilizaban estos espacios para resistir a la ofensiva del Ejército contra Ramadi, pero no habían podido evitar que elementos del Ejército tomaran el conjunto de edificios.
Gracias a este avance de las tropas iraquíes, los extremistas se están retirando hacia el noreste de la ciudad.
Vale acotar que horas antes, los soldados lograron detener en la ciudad a uno de los líderes del Estado Islámico, cuya identidad todavía no ha sido revelada. Aunque según otros datos, el radical fue abatido durante el operativo.
OFENSIVA ANTITERRORISTA
Las tropas iniciaron una ofensiva contra el centro de la capital de la gobernación de Al Anbar el martes pasado. Un portavoz militar destacó en aquel entonces que el movimiento extremista impidió que la población civil abandonara la ciudad.
Este sábado las fuerzas antiterroristas acercaron sus posiciones al barrio gubernamental tras avanzar un kilómetro en aproximadamente 24 horas mediante combates, como dijo portavoz del Ejército.
Los ataques aéreos permitieron destruir los explosivos que los terroristas habían instalado para evitar el avance del Ejército.