La rehabilitación de Islandia luego de varios años marginado en el mercado financiero mundial agarró ritmo la noche del viernes luego que la agencia calificadora Fitch dijo que las deudas de la nación isleña se habían movido más hacia el grado de inversión.
Fitch afirmó que las deudas de Islandia habían ascendido a BBB — desde el peldaño más bajo de la categoría de grado de inversión, BBB — luego de una fuerte recuperación de la crisis financiera.
La recuperación meteórica de Reykjavik (capital de Islandia) se produce después que a sus 300.000 residentes se les dijo que serían excluidos de los mercados financieros del mundo durante décadas ya que se negaron a rescatar a un grupo de bancos en quiebra en el año 2008.
A diferencia de Irlanda, Portugal y España, el gobierno de Islandia dejó que los bancos del país se declararan insolventes en vez de gastar decenas de billones de libras esterlinas en fondos de rescate.
Paul Rawkins, director del Grupo de Calificación Soberana Fitch, dijo: «La restauración a largo plazo de la calificación en moneda extranjera a grado de inversión de Islandia refleja el progreso que se ha logrado en la restauración de la estabilidad macroeconómica, siguiendo adelante con las reformas estructurales y reconstruyendo la solvencia soberana desde la crisis bancaria y de divisas del 2008».
«Islandia exitosamente salió de su programa con el FMI y ha ganado un renovado acceso a los mercados internacionales de capital. Una prometedora recuperación económica está en camino, la reestructuración del sector financiero está muy avanzado, mientras que la deuda pública/PIB parece estar cerca de un punto máximo al dorso de un programa de consolidación fiscal robusta».