El régimen de Israel acaba de ganarse una nueva reputación, la revista The Economist ha clasificado a Tel Aviv como la décima ciudad más cara del mundo, entre las 133 ciudades catalogadas. La ciudad costera israelí está al lado de Los Ángeles, California, en la lista de las urbes más caras del mundo.
Tel Aviv escaló del puesto 28 de la lista, subiendo 18 puestos en tan solo cinco años. Esto dice mucho sobre la velocidad del aumento del costo de vida en los territorios ocupados por Israel y lo que esto significa para los israelíes.
Según el nuevo informe de The Economist, el aumento en el costo de la vida se debe, en parte, a la apreciación de la moneda, la inflación y los costos que elevan significativamente los precios.
Estos costos incluyen comprar, asegurar y mantener un automóvil que les cuesta a los israelíes un 64 % más de lo que pagan los estadounidenses en Nueva York por los mismos tipos de servicios.
De hecho, Tel Aviv se ha vuelto tan cara que el costo promedio de una barra de pan de 1 kilogramo es de 5,09 dólares, en comparación con los 3,40 dólares que cuesta en Singapur y los 3,91 dólares en Hong Kong.
Mientras que algunos celebraron el hecho de que Tel Aviv entrara en la lista de los lugares más costosos del mundo de la revista The Economist, muchos otros señalaron que están viviendo las realidades del alto costo de la vida en los territorios ocupados por el régimen de Israel.
No es un secreto que la mayoría de los israelíes no puede permitirse el lujo de vivir en Tel Aviv, mientras una minoría cosecha las recompensas.