El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y el líder palestino Mahmud Abas se reúnen hoy para sondear si sus intenciones de llevar la paz a Oriente Medio son serias, tras la reciente reanudación de las negociaciones en Washington.
Pero esta nueva sesión de negociaciones en Sharm el Sheij (Egipto), en presencia de la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, corre el riesgo de quedar lastrada por la polémica sobre la congelación de la colonización, destacó AFP.
“Los palestinos quieren que no se construya absolutamente nada en Judea-Samaria (Cisjordania) después del 26 de septiembre, y esto no será así”, informó Netanyahu anoche al ex jefe británico, Tony Blair.
“Israel no proseguirá la congelación, pero tampoco construirá las decenas de miles de viviendas planificadas. No congelaremos la vida de los habitantes de Judea-Samaria y no congelaremos la construcción”, añadió.
Netanyahu también indicó a Blair que el reconocimiento de Israel por los palestinos como Estado-nación no le parece una condición previa de las negociaciones de paz.
“No es lógico que los palestinos fijen condiciones previas y amenazan con abandonar las negociaciones. No es una manera de progresar hacia la paz”, agregó.
Los palestinos ya han advertido de que el fin de la moratoria de construcción en las colonias -de diez meses y que expira el 26 de septiembre- supondría el final del diálogo directo.
DIVISIONES
El Gobierno israelí está dividido sobre el asunto de la moratoria: el ala más derechista, integrada por representantes de los partidos religiosos, el partido Israel Beiteinu del canciller Avigdor Lieberman y varios ministros del partido Likud de Netanyahu se oponen a cualquier congelación en la colonización.
“Sólo permaneceremos en un Gobierno” si prolonga la congelación y “nuestra salida podría causar el hundimiento de toda la coalición”, avisó el diputado Zvulun Orlev, del pequeño partido nacionalista religioso Bait Yehudi.
El Partido Laborista está a favor de la prolongación de la moratoria. “Descartamos sabotear las negociaciones para una reactivación de las construcciones”, expresó el diputado Daniel Ben Simon.
Los palestinos consideran que la ocupación por la fuerza, desde 1967, de Cisjordania, impide la constitución de un Estado viable y que tenga continuidad territorial.
TRES MUERTOS DEJÓ ATAQUE ISRAELÍ CONTRA GAZA
Tres palestinos, todos civiles, murieron ayer en la Franja de Gaza víctimas de un ataque armado de tropas israelíes cerca de la frontera norte, confirmaron fuentes médicas y de la resistencia.
Los fallecidos fueron un pastor y un granjero de 91 años de edad, identificado como Ibrahim Abdulah Abu Sayed; su ieto Hossam Khaled, de 17, y otro joven de 20 años, nombrado Walid Abu Roda, que residían en la localidad seotentrional de Beit Hannoun, reportó Prensa Latina.
Soldados hebreos dispararon contra una zona residencial del norte de Gaza con el pretexto de que evitaban así una supuesta agresión terrorista.