Los sectores de oposición en Venezuela basan sus fuerzas, expectativas y posibilidades en factores externos para acceder al poder, han dejado a un lado la vía democrática y electoral por la fuerza, han abandonado el campo de la política y ha asumido el camino de la violencia, armas y de la destrucción.
La oposición venezolana en la actualidad utiliza el terrorismo como práctica política, el fascismo como expresión de la sociedad, “algo nunca antes visto”, reprochó el vicepresidente para el Socialismo Territorial, Aristóbulo Istúriz, durante entrevista con José Vicente Rangel, este domingo.
A su juicio la política actual se centra en la confrontación antagónica de dos modelos de país, y es el pueblo quien debe decir por mecanismos democráticos y electoral.
Isturiz lamentó que la oposición en casi 20 años no haya reconocido al chavismo, al bolivarianismo y a la izquierda como un fuerza política adversaria, “es una oposición que no ha reconocido al contrario, no reconoció a Hugo Chávez (…) para ellos -opositores- el liderazgo de Chavéz los despojó del poder y ahora deben recuperarlo, así sea por la vía de los hechos y no por la vía democrática”.
Hay sectores que para llegar al poder no les importa entregar la Patria, hipotecarla, derramar sangre, agregó el vicepresidente para el Socialismo Territorial.
“Yo creo que nosotros en la Constituyente debemos dejar perfectamente claro el delito de traición a la Patria y las sanciones contundentes a quienes hagan eso”, manifestó.
SIN FANB NUNCA HABRÁ GOLPE DE ESTADO
En el programa José Vicente Hoy, transmitido por el canal privado Televen, Aristóbulo Istúriz, destacó la fortaleza de las instituciones venezolanas, entre ellas la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) quien ha recibido vejaciones, insultos y desprecio por parte de sectores de la oposición que buscan ultrajar la moral de todos.
Con la llegada de la revolución, la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) retomó un camino de dignidad, de estímulo patriota.
“Hugo Chávez estimuló la unión cívico militar como la columna vertebral para mantener el proceso revolucionario (…) se vinculó mucho con el pueblo y allí ellos -opositores- vieron a la fuerza armada como un enemigo. Por eso nunca va a haber un golpe de Estado sin la participación Fuerza Armada Nacional Bolivariana”, agregó.
El dirigente nacional, alertó que tras el poco entendimiento entre la FANB y las prácticas opositoras los dirigentes no piensan en militares venezolanos, “piensan en el Comando Sur, en fuerzas de la OTAN (Organización de Tratado Atlántico Norte). Buscan factores externo, bien sea por la diplomacia (OEA) o la militar”.
Ellos tienen mucha aspiración de una intervención en Venezuela, la mediática internacional les ha funcionado, agregó el funcionario.
AISLAR A MADURO
Demostrar que Venezuela supuestamente cuenta con una institucionalidad frágil, que no existe autonomía de Poderes Públicos para influenciar a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana y justificar una intervención ante los ojos del mundo, es el objetivo de la oposición.
“Ellos buscan un aislamiento del presidente Maduro y el ejecutivo nacional para influenciar la FANB”, declaró Iztúriz.
A su juicio la posición de la fiscal General de la República, Luisa Ortega Díaz, evidencia al mundo que en Venezuela no hay un control de los poderes por parte del Ejecutivo.
LA CONSTITUYENTE VÍA AL DIÁLOGO
El también ministro del Poder Popular para las Comunas, destacó el talante democrático del presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, quien en cuatro años de gestión ha reiterado el llamado al diálogo y al entendimiento, “porque estamos obligados a coexistir”.
Para Iztúriz la oposición agotó las formas de diálogo con el Gobierno Nacional, debido a que cuando lograron sentarse en la mesa de diálogo, convocada por el jefe de Estado y acompañada por la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y El Vaticano, desconocieron los acuerdos de convivencia política.
“Sin embargo el Presidente siguió insistiendo”, agregó. Los altos dirigentes de partidos opositores no solo abandonaron el diálogo, sino que lo sustituyeron por acelerar la violencia y el terrorismo, opinó.
Ante la negativa de diálogo nace la convocatoria a la Asamblea Nacional Constituyente (ANC). “La Constituyente es la opción”, enfatizó.
Aquí se trata de que el pueblo participe, porque es una Constituyente popular y ciudadana, dijo Istúriz.
La paz, el diálogo, la revisión del sistema de justicia para vencer la impunidad, rango constitucional a las conquistas sociales logradas en revolución, la organización del pueblo, son ejes fundamentales de la Constituyente, sostuvo el vicepresidente para el Socialismo Territorial.
La Constitución del 1999 es una Constitución programática “aquí diseñamos el país que queríamos” y con la nueva ANC haremos lo mismo, afirmó