39 años han transcurrido desde que autoridades militares prendieran fuego al palacio de gobierno chileno, ocupado por el primer presidente marxista en América Latina que accedió al poder por elecciones democráticas, Salvador Allende. El fuego de su espiga sigue vivo en centenares de estudiantes que continúan exigiendo la soberanía cultural del país como vía a un modelo más humano y participativo, destacó el filósofo mexicano Jorge Veraza.
En su participación durante el programa semanal La bodega cultural, transmitido por Alba Ciudad 96.3 FM, el ganador de la 7ma edición del Premio Libertador al Pensamiento Crítico indicó que «el gobierno chileno debería aprender de sus estudiantes, quienes están indicando el camino humano y de desarrollo nacional a través de la cultura. Regresar a los ideales de Allende sería lo mejor, aunque lo que realmente se requiere es que se reconozca la soberanía del país y esto está en la cultura, porque si no hay soberanía cultural, ¿cómo cultivas a tu gente para garantizar una enseñanza sin que sea elitista?», reflexionó Veraza.
El ministro para la Cultura, Pedro Calzadilla, participó en la discusión al recordar los sucesos que provocaron el desenlace lamentable aquella tarde chilena de 1973. «Esa fue la época en que los Estados Unidos desplegó toda su maquinaria imperial, pusieron los militares al servicio de sus intereses y provocaron el horror, las desapariciones físicas, torturas y persecuciones. Lo ocurrido marcó la historia del continente americano», señaló.
El gobierno de Allende fue una de las primeras experiencias izquierdistas en Latinoamérica, su llegada a la presidencia de Chile introdujo al país en un modelo democrático y participativo que se caracterizó por la defensa de la clase obrera, la transformación de la economía y apertura de proyectos sociales en beneficio de los más desposeídos.
«La revolución bolivariana es heredera de esa fuerza que se sembró en Chile. Que la izquierda llegara al país por la vía electoral y que de inmediato iniciara la transformación del país, es una muestra de lo que nosotros hemos hecho hasta ahora», reflexionó Calzadilla.
Aunque ya son 39 años, Veraza hizo énfasis en que el modelo burgués impuesto por las grandes capitales del mundo no ha renovado su discurso y estrategia de llegar a la gente. «Ellos (la burguesía) no conciben otra manera de tratar al pueblo, de tratar a América Latina en su conjunto, porque no tienen capacidad de tener nuevas formas de coordinación ni de ejercer la hegemonía», expresó al cierre del programa radial.