Tener a José Tábata en sus filas había sido uno de los mayores deseos para los Navegantes del Magallanes en las últimas temporadas. Dicha aspiración la pudieron cumplir para esta zafra, aunque sabían que el material a entregar tenía que ser de igual valor, por esto cedieron a Tomás Telis, un receptor con experiencia en las Grandes Ligas.
Sin embargo, José Tábata está demostrando que es una adquisición que “no tiene precio” para Magallanes, al tener apenas siete juegos de acción y mantener un astronómico promedio de .567, adueñándose del liderato de incogibles de la LVBP con 17 petardos, además de dominar el circuito en porcentaje de embasado con .594.
Para José Tábata, esta temporada con la nave puede significar una oportunidad para regresar al beisbol organizado en Estados Unidos, pues su última experiencia en el verano la tuvo con los Tigres de Quintana Roo en México.
“Mi carrera fue un poco hacia abajo, y quiero volver a ser el Tábata de antes, por eso me uniformé desde tan temprano. Quiero hacer un gran trabajo para volver al mejor beisbol (MLB). Se han visto muchos casos de veteranos que juegan en México o la LVBP y regresan a las Mayores, en ellos me quiero fijar y poder conseguir lo mismo”, admitió Tábata, que en la jornada del jueves se fue de 5-5, con doblete y un par de impulsadas. Con esos cinco inatrapables igualó el registro de Dimas Gutiérrez, que consiguió la misma cantidad de hits en la temporada de 1986, y hasta el pasado jueves ningún toletero de los eléctricos lo había vuelto a conseguir.
Los mantiene a flote
El comienzo ofensivo de la nave ha sido muy lento en esta campaña, siendo José Tábata y Luis Arráez las únicas piezas del lineup de Carlos García que han podido ligar imparables para Magallanes en los siete encuentros de la campaña.