El Correo del Orinoco en su edición del sábado 21 de abril de 1821 publica en su última página la triste noticia del fallecimiento de Juan Germán Roscio, para entonces vicepresidente de Colombia, la bolivariana. La nota, colocada en un recuadro titulado “Necrología” informa que Roscio había fallecido el 9 de marzo, aunque posteriormente los historiadores han confirmado la fecha del 10 de marzo. De Roscio, cuyos restos simbólicos serán llevados al Panteón Nacional el miércoles 10 de marzo, el periódico angostureño señala que fue un sabio ilustre, un patriota eminente, un magistrado íntegro.
El traslado de Juan Germán Roscio al Panteón Nacional por el Gobierno de Nicolás Maduro es considerado como el pago de uno deuda y un acto de reconocimiento para quien está catalogado como uno de los ideólogos del movimiento emancipador venezolano contra España y uno de los redactores del Acta de Independencia. Además, Roscio prestó inmensos servicios a la patria. Fue uno de los directores y redactores del Correo del Orinoco, fundado por Bolívar. Para el momento de su deceso se encontraba en la Villa del Rosario de Cúcuta, designado por el Libertador para presidir el congreso que redactaría la Constitución de Colombia.
La información del Correo del Orinoco plasma las virtudes de Roscio y su entrega a la causa de la libertad y la independencia.
“Al anunciar el fallecimiento”, indica el periódico, “del Excelentísimo Sr. Vice Presidente Interino de Colombia Dr. Juan Germán Roscio, sucedido el 9 de marzo (sic) último en la Villa del Rosario de Cúcuta, el más acerbo dolor nos recuerda la pérdida de un Sabio ilustre, de un Magistrado íntegro, de un Patriota eminente, y de un virtuoso ciudadano. Desde el año de 1810 en que Venezuela derrocó al despotismo hasta el día en que, después de un viaje penoso y dilatado, llegó al principio de este año a la nueva capital del Estado, mil graves y difíciles empleos ocuparon de tal suerte su vida, que puede decirse con verdad que, ni un momento respiró, sino en servicio de la Patria. Su constancia en la adversidad excede a todo encarecimiento; ni las cadenas y mazmorras, ni las miserias y trabajos llegaron a …(ilegible) su impávida firmeza o a desviarle un paso de la senda del honor; y aun los déspotas mismos que le oprimían , se vieron obligados a admirar la grandeza de su alma, y la superioridad de su virtud,. Aunque ya no existe entre nosotros, su memoria vivirá eternamente, y sus escritos elocuentes, en que confundió e hizo temblar a los tiranos, defendió la causa de la libertad, y sostuvo los derechos de la humanidad, serán siempre leídos con placer y entusiasmo por nuestras más distantes generaciones”.
Representante del pueblo
En la abundante literatura historiográfica de Juan Germán Roscio se asienta que nació en San Francisco de Tiznado, estado Guárico, el 27 de mayo de 1763, y falleció el 10 de marzo de 1821 en la Villa del Rosario de Cúcuta.
Roscio era hijo de José Cristóbal Roscio, oficial retirado y hacendado, nativo de Milán, que había vivido en España y se había avecindado luego en la provincia de Venezuela, y de Paula María Nieves, nacida en La Victoria (estado Aragua). Los primeros años transcurrieron en San José de Tiznados, en donde su padre poseía hatos de ganado. Allí aprendió las primeras letras. En 1774, se trasladó a Caracas para iniciar sus estudios superiores bajo la protección de la hija del conde de San Javier.
Manuel Alfredo Rodríguez en su estudio y libro El Correo del Orinoco señala a Juan Germán Roscio como uno de los directores y redactores del periódico fundado por Simón Bolívar.
“… Ganó en 1790 (Roscio) el primer premio en un concurso de Derecho Civil”, señala Alfredo Rodríguez, “propuesto en la Universidad de Caracas, otro primer premio en un concurso similar sobre Sagrados Cánones y primera medalla y otro premio en efectivo en certamen auspiciado en 1794 por la Academia de Derecho Público Español. Estudió cuatro años de Teología, se graduó de doctor en Cánones e hizo la pasantía para recibirse de Abogado. Era hijo de italiano y mestiza, y después de un ruidoso proceso de siete años (1798 a 1805) se le fijó ingreso al Colegio de Abogados para el año de 1808, siempre y cuando presentara ciertos documentos. Se le acusó de haber dolorosamente la mención de la raza india de su abuela materna, se quiso desconocer en su caso la igualdad que la legislación otorgaba a los indios con respecto a los blancos y, finalmente, su afirmación de que todos los hombres son iguales y solo se diferencian por la virtud y el talento le mereció la calificación de propagador de las doctrinas revolucionarias que habían agotado Gual y España. Durante el tiempo del litigio, Roscio fue catedrático de Derecho Civil en la Universidad y dictó cursos sobre Derecho Público Español y Leyes de Indias”.
Añade Rodríguez que Roscio participó en los sucesos del 19 de abril y se incorporó al Cabildo de Caracas como “representante del pueblo”. Fue secretario de relaciones exteriores, diputado del Primer Congreso de la República, colaborador de la Gazeta de Caracas en su primera época, adversario de Miranda, de Sanz y de la Sociedad Patriótica por reputarlos exaltados, corredactor del Acta de la Independencia y de la Constitución Federal de 1811, secretario interino del Estado y del Despacho General y, después de la capitulación de Miranda, prisionero de Monteverde en las mazmorras de La Guaira. Fue remitido a la prisión africana de Ceuta, pero pudo evadirse a Gibraltar, donde fue retenido por el funcionario inglés y devuelto a las autoridades españolas. Sin embargo el ministerio británico, presionado por una vigorosa campaña de opinión, destituyó al funcionario y logró que los prisioneros fueran devueltos a Gibraltar.
“En 1817 Roscio se dirigió a Filadelfia donde publicó su Triunfo de la libertad sobre el despotismo. “Esta obra”, anota Pedro Grases, “tuvo numerosas reimpresiones posteriores (dos más en Filadelfia, 1821, 1847; y tres en México, 1821, 1828 y 1847)”. En México se ha dicho que era uno de los libros de cabecera de Benito Juárez… Pedro Grases ha resumido el pensamiento del prócer diciendo: “La intención capital de los escritos de Roscio es la de hacer compatibles las creencias religiosas católicas con las ideas políticas revolucionarias de los partidarios de Hispanoamérica”. La exactitud de este juicio queda confirmada por Roscio en Filadelfia al sufrir una grave enfermedad en abril de 1818: “Primeramente declaro y confieso que profeso la religión santa de Jesucristo y, como más conforme a ella, profeso y deseo morir bajo el sistema republicano y protesto contra el tiránico y despótico gobierno de monarquía absoluta como el de España”, señala Manuel Alfredo Rodríguez.
Rodríguez agrega que la conducta conservadora de Roscio en los días iniciales de la independencia, cuando se enfrentó al ala radical, podría ubicarlo en el sector moderado de aquellos años, sin embargo, no lo desmerita.
“Esa circunstancia no resta méritos a su heroísmo civil ni a las sobresalientes condiciones de “jurista, profesor, legislador, hombre de Estado, parlamentario, ideólogo y periodista” que la asigna con justicia uno de sus biógrafos. En 1818, al llegar a Angostura después de una ausencia prolongada, dolorosa y creadora, el Libertador lo nombra director de Rentas y secretario de Hacienda y le incluye en el Consejo de Estado y la redacción del Correo del Orinoco, apunta Rodríguez.
Otros acercamientos históricos a Roscio lo califican como uno de los oradores más audaces durante el Congreso Constituyente del 2 de marzo de 1811.
Ruta al panteón
Reinaldo Bolívar, quien ocupara el cargo de viceministro para África de la Cancillería, y quien dirige el Centro de Saberes Africanos, figura como un tenaz promotor de la iniciativa de rendirle homenaje a Juan Germán Roscio llevándolo al sitial que merece en el Panteón Nacional. Bolívar, guariqueño, nativo de San José de Tiznado, ha sido orador de orden en el municipio Juan Germán Roscio, cuya capital es San Juan de los Morros, y ha exaltado la vida y obra del prócer civil, igualmente por el programa que conduce en Radio Nacional de Venezuela, los jueves en la mañana.
En el portal web de Aisur (Agencia internacional del Sur) y del centro de Saberes Africanos se ha hecho un minucioso registro de las actividades que ocurren por estos días en varios estados del país donde estuvo Juan Germán Roscio y en los cuales se han tomado porciones de tierra para ser llevados al Panteón.
El portal de Aisur indica: “Desde el 01 de marzo hombres y mujeres del estado Guárico se dirigieron a varios puntos de la geografía nacional a tomar muestras de los suelos pisados por el primer prócer civil de Venezuela, Juan Germán Roscio Nieves, quien el próximo 10 de marzo, en conmemoración a sus 200 años de su fallecimiento, recibirá honores protocolares en el Panteón Nacional de Venezuela, decretado por el Presidente Constitucional y la Asamblea Nacional de la República Bolivariana de Venezuela”.
La nota aclara e informa que los restos físicos del brillante luchador y patriota venezolano aún no han sido localizados. De acuerdo a su acta de defunción fueron enterrados en la iglesia de la Villa del Rosario de Cúcuta, donde falleció ejerciendo la Vicepresidencia de Colombia y preparando como presidente el Congreso Fundacional de la República. Algunas tesis apuntan también a que el cuerpo del héroe pudo haber sido trasladado a Capacho, estado Táchira, por su hija Paula María Roscio Cuevas, quien se residenció allí. Estas investigaciones llevan más de 100 años, sin dar resultados concretos. Si bien van a continuar, es hora, como lo han acordado los poderes públicos del país, liderados por el presidente Nicolás Maduro, y en Guárico por el gobernador José Vásquez, con el beneplácito del pueblo, que la memoria del pensador e ideólogo de la liberación americana sea honrada con el traslado simbólico de sus restos al Panteón Nacional.
La ruta histórica ha cumplido una serie de etapas. El 4 de marzo, la comisión recibió la muestra de tierra tomada del hato La Guamita, lugar de nacimiento del célebre prócer. Se realizó una sesión especial del Concejo Municipal de Ortiz. Con teatro y cantos la población de San Francisco de Tiznados celebró el magno acontecimiento.
El 4 de marzo, el Concejo Municipal Francisco de Miranda, en Calabozo, del cual Roscio Nieves fue diputado al Congreso de 1811, realizó una sesión conmemorativa de los 200 años de la muerte del héroe civil. Ese mismo día, el cabildo del municipio Leonardo Infante, rindió el mismo honor en la plaza Bolívar de Valle de la Pascua.
Las Mercedes del Llano, capital del municipio Juan José Rondón, también se sumó a los actos con una solemne sesión.
De los jardines de la Casa de Gobierno de Angostura, en Ciudad Bolívar, donde por varios años despacho el Vicepresidente de Venezuela y de Colombia, la bolivariana, el gobierno regional de Bolívar, tomó una muestra de esa augusta tierra, que también irá al Panteón Nacional
También en el estado Táchira, en Capacho, y en la Villa del Rosario de Cúcuta (Colombia), las comisiones de la Ruta Histórica fueron recibidas por autoridades, estudiosos y patriotas para enviar al Panteón Nacional una muestra de la tierra pisada por el quien fuera presidente del Congreso Fundacional de Cúcuta.
Para el domingo pasado estaba prevista que en San Juan de los Morros se recibieran las muestras de tierras recogidas en las cuatro entidades.
Para el lunes 8 de marzo se programó una sesión solemne conjunta del Consejo Legislativo guariqueño y la cámara del municipio Juan Germán Roscio, en el casco histórico de San Juan de los Morros, en honor al prócer.
El 9 de marzo, Guárico despidió los restos simbólicos de Roscio, que serán recibidos en la histórica capilla Santa Rosa de Lima, en el Palacio Municipal de Caracas.
“El 10 de marzo, cuando se cumplen 200 años de su pase a la inmortalidad, su memoria será elevada por el presidente de la República Nicolás Maduro Moros junto al pueblo venezolano al más alto altar de la patria, al lado de Simón Bolívar, de los grandes hombres y mujeres de Venezuela, entre los cuales se encuentran sus paisanos Juan José Rondón y Matea Bolívar”.
T/ Manuel Abrizo
F/ Archivo CO