El juez penal del municipio norteño de Montería, Salvador Romero, dictó este miércoles una orden de prisión preventiva contra cuatro militares en activo y cinco altos oficiales en retiro por robo y tráfico de armas en el ejército.
El escándalo se destapó el pasado lunes cuando la Fiscalía General de la República inició un nuevo proceso judicial contra el teniente coronel (r) Robinson Gonzalez, supuesto jefe de la red que sustraía armamento y municiones para venderlas a la banda paramilitar Los Urabeños.
Ninguno de los detenidos (a los que se sumaron dos civiles) aceptó los cargos de concierto para delinquir, tráfico de armas y peculado por apropiación, imputados por el juez Romero.
En la fase de imputación de los cargos la fiscalía que, según fuentes oficiales investigaba los hechos hace dos años, presentó documentos y pruebas reveladoras de la actuación de los acusados, trasladados a Bogotá ante el hacinamiento de la cárcel Las Mercedes de Montería.
Comandada presuntamente por González y un oficial retirado cuya identidad no se reveló, la red actuaba coordinadamente para facilitar la adquisición de todo tipo de armas, municiones y explosivos destinadas a los grupos delicuenciales.
Según el vicefiscal general, Jorge Perdomo, los involucrados extraían de forma subrepticia material militar de guerra y repuestos en los depósitos de armas, en distintas zonas del país, por mediación de los suboficiales responsables de su control.
Luego utilizaban su investidura militar para burlar los retenes policiales y transportar la mercancía.