Esta tarde a las 2:00 en la plaza de la Juventud, cerca del bloque 17 de La Cañada, en la parroquia caraqueña del 23 de Enero, las niñas y los niños de la localidad tendrán la oportunidad de presenciar el nacimiento del espectáculo escénico, aún en desarrollo, titulado El viaje de Balú, una historia de creación colectiva que surgió gracias al trabajo en conjunto entre integrantes de la comunidad, animadores de la Misión Cultura Corazón Adentro y la agrupación Teatro y Títeres Cantalicio de la UCV (Universidad central de Venezuela).
El viaje de Balú, es una propuesta de naturaleza experimental que emplea el lenguaje del teatro de objetos para contar la historia de Balú, un personaje conformado por pelotas, confinado en un baúl, junto con otros objetos-personajes, que desea hacer un viaje.
Según contó el animador de la Misión Cultura Corazón Adentro y habitante del 23 de Enero, Rabín Azuaje, en la narración intervienen también tres paraguas: dos disfuncionales, con problemas, y uno bueno, a quienes Balú debe solicitar ayuda para cumplir su sueño de viajar.
UNA HISTORIA DE INCLUSIÓN
“Los tres paraguas se sienten como en familia, aunque cada uno tiene su historia al igual que cada uno de los balones que forman a Balú. A la hora de planear el viaje todos quieren participar, pero dadas las limitaciones de los paraguas que tienen problemas, es el que está en buen estado quien comienza a hacer el viaje”, anticipó Azuaje.
Al iniciarse el viaje de Balú con el paraguas en buen estado, los otros dos se sienten traicionados y los hacen caer a tierra. Es entonces cuando Balú y el
paraguas en buenas condiciones entienden que deben buscar la manera de sumar a los demás a la aventura.
EL COMIENZO
En conversación con el Correo del Orinoco el director del grupo Universitario de Teatro y Títeres Cantalicio, José Ramón Fernández, explicó que esta iniciativa surgió de la necesidad de este grupo de vecinos del 23 de Enero y promotores de la Misión cultura Corazón Adentro quienes se acercaron a la UCV para plantear la posibilidad de organizar un taller que les permitiera adquirir algunas herramientas básicas relacionadas con la expresión escénica.
Es así como Cantalicio estructuró un proyecto de Curso Ampliado de Teatro de Títeres, dividido en tres módulos, de los cuáles el primero concluye con la presentación de hoy.
No obstante, advirtió Fernández, el proceso creativo continúa y por tanto la pieza “va a evolucionar, es probable que cambie, que se agreguen cosas, que se supriman o trasformen otras. Es un laboratorio, y por tanto el proceso va madurando a medida que se vaya presentando la pieza, porque la relación con el público es un lenguaje que tenemos que percibir y entender que puede de pronto exigir alguna variación para que el mensaje funcione como lo tenemos previsto.
PARA LA REFLEXIÓN
A lo largo del proceso de creación colectiva las y los participantes discutieron, incluso el uso de cada uno de los objetos. “Esto no fue producto del azar, sino de un trabajo de debate y reflexión”, acotó Fernández.
Cada uno de los elementos que funcionan como personajes tiene una razón que, a decir del colectivo, se entenderá en escena, incluso la presencia del baúl que en principio tiene una connotación misteriosa. Lo importante, consideró Fernández, es que cada una de las decisiones se tomaron en grupo.
“Balú, esta formado por varios balones y pelotas, eso no es gratuito. La idea fue plantear los valores esenciales del individuo” y mostrar cómo se potencian cuando
se suman a los de los demás para materializar el viejo adagio según el cual en la unión está la fuerza. “Entonces es un poco ver cómo esta historia se yuxtapone con nuestra realidad general y ver es lo que hay que buscar”, para mejorar nuestra situación, agregó el director de Cantalicio.
SIN TEXTO
En este primer momento, como se trata de una propuesta de carácter experimental, la pieza no sigue un texto en específico. Por el contrario, toma como base discursiva la acción espontánea, la gestualidad y la intencionalidad del producto de creación colectiva que surgió de problematizar el individualismo y su influencia sobre el colectivo.
Todo esto sostenido a su vez de la propia historia de cada uno de los elementos que intervienen o tienen voz dentro del discurso dramático.
Está previsto que esta pieza laboratorio se presente en otros espacios, probablemente en Antímano, donde Cantalicio también trabaja con las comunidades, e incluso dentro de la UCV.
SUMA Y SIGUE
Luego de concluir esta primera etapa del proyecto de Curso Ampliado de Teatro de Títeres, planteado por Cantalicio, este grupo de aproximadamente nueve integrantes de la comunidad del 23 de Enero aprenderá el proceso de elaboración de títeres de guante, su manipulación y su potencial para canalizar el lenguaje
dramatúrgico. Finalmente, la última etapa del proceso de formación se concertará en la elaboración de muppets o bocones, con sus respectivo trabajos dramatúrgico en el cual tiene una participación especialmente activa todo el conjunto o colectivo.