China es la primera potencia mundial en energía solar. Las plantas fotovoltaicas del gigante asiático podrían alcanzar a finales de este año los 90 GW de potencia instalada, según los cálculos oficiales. En comparación, Estados Unidos tenía a finales de 2016 un total 26 GW y España, 4,7 GW.
Además de potencia eléctrica, algunas empresas chinas especializadas en energía solar apuestan también por difundir su imagen internacionalmente con estrategias muy singulares.
La compañía Panda Green Energy Group, por ejemplo, ha inaugurado este verano en Datong un gran parque de energía fotovoltaica en el que se han utilizado los paneles solares para dibujar sobre el terreno grandes imágenes del animal más emblemático del país, el panda gigante.
La construcción de esta central eléctrica se iniciaron hace menos de un año y entre sus equipos se incluyen paneles solares con base de silicio monocristalino en diversos colores. La planta ha costado el equivalente a unos 50 millones de euros y puede generar la electricidad que consumen unas 10.000 familias.
La instalación inaugurada este año cuento con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y forma parte de una iniciativa que incluye la construcción en China de 100 centrales en las que se incluirán imágenes de pandas propuestas por escolares.
La zona de Datong se encuentra entre las más contaminadas de China, especialmente a causa de las minas y centrales de carbón (que ahora podrán ser parcialmente substituidas por la energía solar).
Panda Green Energy Group pretende construir plantas similares en países como Australia, Pakistán, Rusia, Reino Unidos, Italia, Alemania, España y Francia, según ha difundido esta empresa. JEC
