Con una generación de relevo, Venezuela inicio su periplo en un nuevo ciclo olímpico en las costas de la histórica ciudad de Santa Marta en Colombia, pero con la mirada puesta en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, e incluso viendo mucho más allá, en las citas universales de 2024 y 2028.
La delegación que está integrada en un 60% por jóvenes que no sobrepasan los 24 años de edad, buscará llevarse el mayor número de medallas en la cita deportiva, pero el objetivo no será solamente resultados competitivos sino renovar la delegación nacional en todas sus categorías.
Para el ministro del Poder Popular la Juventud y Deporte, Pedro Infante, la planificación a mediano y largo plazos es fundamental para lograr que Venezuela comience una renovación en cada selección nacional que sea necesario.
“Si queremos profundizar la revolución deportiva y terminar de convertir a Venezuela en una potencia debemos fijarnos un plan a largo plazo. Por ello, acudimos a estos Juegos Bolivarianos con una delegación joven, integrada en un 60% por atletas menores de 24 años. La intención es clara. Con los Bolivarianos iniciamos una planificada renovación para inyectar vitalidad a nuestras selecciones”, afirmó el ministro en días recientes en el marco del abanderamiento.
Para los atletas más jóvenes que vendrán a suceder a una generación de oro que en los últimos 17 años dio un salto cualitativo internacionalmente muy positivo, supone una oportunidad para demostrar que la generación de relevo formada en el Sistema Nacional Bolivariano del Deporte está preparada para continuar con los éxitos de la generación de oro.
Una parte de ellos completará el ciclo deportivo hasta Tokio 2020, pero la mayoría brillará con todo su resplandor en París 2024 o en Los Ángeles 2028. Uno de esos casos cortos que ya dan resultados inmediatos es la luchadora Nathaly Grimán, quien con apenas 25 años venció a la doble medallista de bronce olímpica, la colombiana Jackeline Rentería.
“Para mí es importante estar aquí en estos juegos y ganarle a Rentería. Ella es una campeona mundial, y que yo le haya podido ganar en su casa supone que vamos por el camino correcto”, dijo la veinteañera que solo piensa en estar en los próximos juegos olímpicos.
El futuro promete para una generación de oro que demuestra que con planificación técnica, metodológica y científica está comenzando ese proceso en Santa Marta.