La información internacional contra la soberanía de los pueblos

POR: JESÚS SOTILLO BOLÍVAR*

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En realidad, el debate sobre este tópico no es nuevo, pero hoy cobra mayor relevancia porque afloran con mayor ímpetu y eso es percibido por el mundo. Las apetencias de países que pretenden superar sus crisis internas, avasallando, interviniendo a las naciones a las que no pueden, en palabras de Obama “torcerles el brazo”, para arrebatarle sus recursos naturales. Ese es el quid de la cuestión, arrebatar a otros, para el confort de sus sociedades. En pocas palabras, así se puede sintetizar la conducta de los países imperialistas.

Por supuesto, la información, les brinda un mecanismo, apropiado para lograrlo y utilizan toda la tecnología aplicada a ese campo para preparar el terreno, que les lleve a su meta definitiva, la dominación, la explotación, de todas las naciones, la imposición de gobiernos títeres que sirva de medio a sus fines.

El tema ha venido siendo abordado desde la década de los setenta, la mayoría de las investigaciones sobre el tema comunicación en el área de la información internacional, han concluido en que el flujo de información entre los países autodenominados desarrollados y el resto, es totalmente desequilibrado. Más del 80 por ciento de la información que consumimos nos viene por vía internacional (Estados Unidos y Europa) y no hay correspondencia a la inversa.

Eso, incluso, lo puede apreciar cualquier persona de nuestros países, que viaje a Estados Unidos o Europa, sin ni siquiera, proponérselo, basta ver los periódicos del país visitado y observará, que los nuestros ni se nombran, al menos que sea en noticias negativas, calificándolos como países violentos, narcotraficantes, irrespetuosos de los derechos humanos, corruptos, incivilizados y otros calificativos, muy propios del arsenal de términos que tienen ellos para estigmatizarnos.

El tema de la información, que hoy es vital, porque se ha descubierto su poderosa capacidad, para ablandar, manipular, lavar cerebros etc. Ha entrado en el mundo de la globalización y hoy utilizando las agencias tradicionales de información, más los laboratorios de guerra sucia y el manejo sesgado de las denominadas Redes Sociales, se conforman verdaderos maquinarias, que al unisonó, con una labor planificada, desarrollan una labor de penetración que ejerce una extraordinaria influencia en la opinión pública latinoamericana y sobre los pueblos de otras latitudes, porque su ámbito es mundial. Las Redes Sociales, pretenden ser utilizadas por algunos países, y eso no lo oculta Estados Unidos, por ejemplo, como verdaderas armas de penetración ideológica, modificando los flujos informativos a su favor y a sus fines intervencionistas.

De allí, que con el apoyo de las agencias internacionales de noticias y el uso de nuevas tecnología aplicadas al campo comunicacional, los mensajes audiovisuales, las noticias, todo el mundo Online, son utilizados por estos verdaderos carteles informativos, con carácter transnacional para influenciar a miles de millones de personas en el orbe y domesticar, si, esta es la palabra correcta, domesticar, para dominar y expoliar.

Todos somos víctimas de este experimento comunicacional y en el caso de Venezuela, país que ha sido sometido en los últimos años a una especie de “linchamiento comunicacional”, podemos observar, como se ha utilizado, una modalidad de esa nueva tecnología, las Redes Sociales, para mantener a la población en un estado de angustia, zozobra, intranquilidad, fomento de odio, propagación de noticias falsas, creación de verdaderos, como lo llaman los periodistas en sus redacciones, verdaderas hoyas de información contaminada para dividirnos, confundirnos, ponernos a dudar, avergonzarnos de nuestro propio país y colocarnos aunque sea transitoriamente al servicio de los intereses de esas grandes potencias manipuladoras. En la mayoría de los casos, ni siquiera nos damos cuenta de esos procesos, porque utilizan no sólo mecanismos explícitos, sino, también, subliminales.

Sin embargo, nuestra respuesta es débil, casi que por reflejo, cada quien responde por separado, si es que responde, cuando todos los países agredidos, deberían, conformar un gran esfuerzo, utilizando el gran poder de las tecnologías comunicacionales para proyectar nuestra verdadera imagen y contraponer una contra información a la que pretende lavarnos nuestra conciencia.

*Profesor de la UCV
Caracas