La Llave Maestra tuvo Chile con ‘Pareidolia’ en cierre  del VIII Festival Internacional de Teatro

La agrupación La Llave Maestra demostró lo que es trabajar con seriedad y pundonor en escenarios poco conocidos y con el mínimo tiempo para ensamblar su propuesta escénica. Y esta compañía hispano-chilena cumplió en sus presentaciones durante el culminado VIII Festival Internacional de Teatro Caracas 2019.

Y demostraron que no son segundones en cuando a su especialidad de teatro visual y de objetos, donde desarrollan un lenguaje surrealista y sorprendente en torno a la materialidad y la relación entre el cuerpo y el gesto. En si, la obra Pareidolia no tiene un tema en específico, sino que toca aspectos de la vida cotidiana con buen humor y el desarrollo de cada acción de una manera tan natural, que casi no se le ven las costuras en su utilización de recursos escénicos como luces, vestuario, maquillaje y precisos efectos especiales.

Pareidolia es un espectáculo visual y sensorial «donde la fuerza de vida radica en su obra y en el constante juego de la transformación de los elementos escénicos en el servicio de las asociaciones de asociaciones, analogías y metáforas visuales. La obra es una invitación a dejarse llevar hacia el imaginario y abrir los sentidos hacia el placer sensorial, sonoro y visual de los objetos, el cuerpo y la materia», según reza una gacetilla de prensa.

Según esa nota de prensa de FITC 2019, es «un espectáculo estructurado casi como un juego en complicidad con el público donde podemos ver, pero también tocar y ser tocado por elementos, materiales y personajes nacidos de un universo fantástico donde todo puede cobrar vida».

Situaciones como peleas de pareja, avestruces que bailan, sapos que cantan y otras escenas no menos sorprendentes y reconfortantes se aprecian en la hora y 10 minutos que dura esta propuesta; aunque si durara dos horas no se quejarían los que asistan. Y todo esto sin decir palabras, sino afianzándose en la música, la mímica y algunas expresiones guturales, aparte de los recursos estéticos ya citados,

En pocas palabras, ojalá que esta agrupación pudiera hacer una temporada más larga en Venezuela, ya que es una muestra de cómo el teatro con historias sencillas y un buen manejo de los recursos tecnológicos y todo lo que implica el quehacer en las tablas, puede llegar a todo público para un sano y verdadero disfrute.

INTEGRACIÓN

Las artes escénicas también deben ser ejemplo de integración. Y prueba de ello lo apreciaron los asistentes al Teatro Municipal de Caracas con el montaje de danza “Ubuntus”, a cargo de la Fundación AM Compañía de Danza de Habilidades Mixtas, se hizo sentir en el Festival Internacional de Teatro con un espectáculo que rompe esquemas en la danza tradicional.

Bailarines sin problemas físicos combinaban su accionar con personas en sillas de ruedas,  amputaciones, visibilidad o audición reducida, síndrome de Down y parálisis cerebral, en el que hicieron valer la filosofía africana que reivindica la solidaridad.

Según nota de prensa, «las sillas de ruedas, muletas, bastones, emergen como recursos sintácticos y semánticos de una forma de decir siempre que la discapacidad física, simplemente, es otra fuente de movimiento. Con cada demostración de posibilidades inimaginables de movimiento, se destruyen prejuicios sobre la discapacidad y, efectivamente,  se demuestra el respeto por las diferencias y la solidaridad».

La Compañía de Danza de Habilidades Mixtas, según especialistas, se ha consolidado como una referencia en la danza contemporánea venezolana y en la creación artística desde la discapacidad motora. Y eso lo vienen demostrando con cada una de sus propuestas de danza, donde cada coreografía se realiza de tal modo que esa integración es palpable y, lo más importante, sin perder el ritmo o el paso.

Y en general, la jornada de las artes escénicas culminó con masiva asistencia a las salas convencionales y espacios abiertos. Un ejemplo lo señaló la alcadesa del Municipio Libertador de Caracas, cuando señaló a VTV que «cerca de 15 mil personas asistieron a ver Carmina Burana (obra que abrió los espectáculos de calle) en el Festival Internacional de Teatro de Caracas», durante tres funcionesl a la entrada de la Plaza de Los Museos en el Parque Los Caobos.

T/ Eduardo Chapellín
F/ Cortesía FITC 2019
Caracas