La policía israelí investiga a Netanyahu por sospechas de soborno y fraude

La policía israelí ha reconocido públicamente por primera vez que una investigación criminal contra el primer ministro Benjamin Netanyahu implica sospechas de soborno, fraude y abuso de poder. Un tribunal israelí dijo el jueves, 3 de agosto, que dos investigaciones en las que el mandatario ha sido interrogado podrían resultar en cargos de corrupción, y que los fiscales estaban en conversaciones con uno de sus antiguos ayudantes.

Las revelaciones, hechas en una orden de la corte que limita la cobertura de los medios de los casos, no nombraron a Netanyahu. Pero aumentaron la especulación entre los analistas legales israelíes de que el primer ministro podría enfrentarse a tales acusaciones si su ex jefe de personal Ari Harow se convierte en testigo del estado.

Los investigadores de la policía han interrogado a Netanyahu varias veces en su residencia y también han hablado con algunos de los amigos y asociados del primer ministro, incluidos los multimillonarios Sheldon Adelson, presidente y propietario mayoritario de Las Vegas Sands, y el productor de Hoolywood Arnon Milchan.

Los detalles de las investigaciones se han filtrado regularmente a los medios de comunicación israelíes, pero con la orden judicial es la primera vez que los posibles cargos fueron hechos públicos por la policía.

En uno de los casos, conocido como Caso 1000, hay sospechas de que Netanyahu, de 67 años, y miembros de su familia recibieron periódicamente regalos, incluyendo cigarros caros y champán, de parte de ricos hombres de negocios. En un segundo caso, el Caso 2000, se investiga el supuesto intento del primer ministro de llegar a un pacto con Arnon Mozes, editor del periódico Yedioth Ahronoth, para tener una cobertura favorable a cambio de restricciones a la competencia

Netanyahu, el segundo ministro más antiguo de Israel, niega todas las irregularidades y dice que las investigaciones son una caza de brujas provocada por sus opositores políticos. Su oficina se negó a comentar sobre las revelaciones de la policía en la orden del jueves.

Harow sirvió como jefe de personal de Netanyahu, entonces jefe de la oposición, en 2008 y se mantuvo en el cargo durante dos años. Regresó en 2014 para servir como jefe de gabinete cuando el político se convirtió primer ministro, pero renunció un año más tarde en medio de denuncias de corrupción que negó en ese momento.

Odelia Carmon, una exayudante de Netanyahu que trabajó con Harow, afirma que si se convierte en testigo del estado sería una “bomba”. “Se ocupó de recaudar donaciones, de las finanzas, de los secretos de Estado”, ha recordado en declaraciones a la Radio del Ejército de Israel . Medios israelíes afirman que Harow podría haber grabado las conversaciones de Netanyahu con el editor del Yedioth.

Según la ley israelí, Netanyahu no estaría obligado a renunciar si se le acusaba, pero tras once años en el cargo, la oposición ya ha empezado a pedir que lo haga.

Netanyahu no es el primer líder israelí que se enfrenta a una investigación criminal: el ex primer ministro Ehud Olmert fue declarado culpable de abuso de poder y soborno en 2014 y Ariel Sharon fue interrogado mientras estaba en el cargo por acusaciones de soborno y financiamiento ilegal.

La policía israelí también está investigando un acuerdo de 2 mil millones de dólares para comprar submarinos alemanes, en el que el abogado personal de Netanyahu también representó al agente local del fabricante alemán. Netanyahu, que no está bajo investigación en el caso, ha declarado su apoyo absoluto a su abogado.

F/lavanguardia.com
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